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25 de Abril de 2006

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Todo un hombre de Estado
Bitácora de Juan Ramón Rallo Julián

El destino socialista de la competencia perfecta


Este martes publico en LD una crítica al modelo neoclásico de la competencia perfecta, fundamento de toda política antimonopolio.

En cualquier curso de Introducción a la Economía los alumnos tienen que estudiar una serie de modelos, a cuál más ridículo, con los que se pretende hacer predicciones realistas sobre la sociedad; los modelos son del todo inútiles, pero permiten reducir los complejos fenómenos económicos a unas pocas y manejables ecuaciones matemáticas. Los modelos económicos se preocupan más de la comodidad del investigador que de la solidez de sus conclusiones.

El mensaje de la legislación antimonopolio es claro: "Señor Empresario, si se atreve a ser el mejor sirviendo a los consumidores será perseguido, sancionado, cercenado y vilipendiado de manera inmisericorde". Todo ello, claro está, para beneficiar a la competencia y, a través de ésta, a los consumidores.

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Comentarios

 
Pero es que hay otros modelos, como los de competencia monopolística, mercados de contienda y oligopolios. Disparas contra una caricatura de la ciencia neoclásica. ¿Qué culpa tiene la ciencia económica de que la malinterpreten los políticos?
Enviado por el día 27 de Abril de 2006 a las 16:49 (1)
Claro que hay otros modelos, los cuales intentan mostrar los efectos nocivos que se producen cuando se desvían de la competencia perfecta. La vara de medir es la competencia perfecta, único modelo donde se alcanza la eficiencia paretiana y se maximiza el bienestar social. En el resto se producen redistribuciones de ese bienestar y pérdidas irrecuperables de eficiencia.

Siempre según estos torpes modelos, claro.
Enviado por el día 27 de Abril de 2006 a las 17:58 (2)
¿Se podrá maximizar el bienestar social sin una diferenciación de productos? Chamberlin reconocía en su modelo que no, y es neoclásico. Además, se reconoce el caso de que un monopolio puede tener la ventaja de tener economías de escala y ser más eficiente que una industria competitiva, y que el que solo haya una empresa en una industria no implica poder monopolístico, ya que hay que tomar en cuenta una competencia potencial, y que dentro de la teoría neoclásica uno también puede reconocer las fallas del estado para administrar regulaciones...
Enviado por el día 27 de Abril de 2006 a las 19:48 (3)
Sí claro, el monopolio según Williamson tiene un menor coste marginal que las empresas en competencia perfecta. Pero los problemas metodológicos de ese modelo no son menores: a) primero porque no todas las reducciones de costes de los monopolios proceden ni mucho menos de las economías de escala, b) no todas las ventajas de los monopolios proceden de reducciones del coste marginal, c) sigue asumiento la existencia de un precio de competencia perfecta distinto del precio de mercado, lo cual es del todo acientífico y podría sentar las bases para solicitar una nacionalización de las industrias, d) el cálculo de ese bienestar social es imposible, no sólo por asumir que el bienestar sólo genera en el momento de la transacción, sino por el absurdo que supone restar un número cardinal a otro ordinal, e) continúa asumiendo que las restricciones están dadas y que sólo hay que resolver el problema de la maximización (omitiendo el papel esencial del empresario), f) no es capaz de incorporar un concepto de eficiencia dinámica que permita explicar por qué ciertas empresas pueden batir al monopolio aun cuando en el presente sean más ineficientes.
Enviado por el día 27 de Abril de 2006 a las 22:25 (4)

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