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2 de Mayo de 2006

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Todo un hombre de Estado
Bitácora de Juan Ramón Rallo Julián

Adiós a la sonrisa sardónica


Hoy tocaba lo que tocaba, es decir, la necrológica de Galbraith. No puedo dejar de sentir cierta decepción al comprobar que nadie de la blogosfera roja ha hablado sobre su vida y pecados. Ya ocurrió con Heilbroner y es ciertamente triste. Y si dejan de jalear a sus intelectuales dudo mucho que sea por prudencia.

En todo caso, aquí está mi crítica a Galbraith. No he pretendido ser ni extremadamente duro ni extremadamente condescendiente. Es cierto que Galbraith acaba de morir, pero no es menos cierto que sus ideas hicieron un tremendo daño al capitalismo y a la libertad. Mi ataque se dirige en lo fundamental a sus ideas y al rol que jugó en difundirlas y popularizarlas. Desconozco si Galbraith fue, como opina Friedman, una bellísima y honradísima persona; sí sé que sus argumentos no lo fueron.

Galbraith fue toda su vida un fiel servidor del poder político, ya fuera de modo directo (como encargado del control de precios con Franklin Delano Roosevelt, como embajador en la India con Kennedy o como asesor presidencial con Johnson) o, sobre todo, indirectamente (a través de su labor como intelectual orgánico). Fue una persona dedicada por entero a denigrar y desprestigiar el capitalismo para, así, justificar la expansión del estatismo.

Lo cierto es que el ente empresarial descrito por Galbraith posee todas las características de un Estado socialista: fijación de precios y salarios, imposición de los patrones de consumo y tamaño mastodóntico. Las diferencias son tan minúsculas que, como el propio autor reconoce, no habría ningún problema en sustituirlas por empresas públicas.

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Comentarios

 
Enviado por el día 2 de Mayo de 2006 a las 23:30 (1)
Nadie en la blogosfera roja :P
Enviado por el día 2 de Mayo de 2006 a las 23:34 (2)
Leí demasiado rápido...
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 00:41 (3)
¿Y por qué debemos condenar a alguien que estaba en el equipo económico que lanzó el boum de la postguerra, la mayor expansión económica jamas vista?

(plagiando a Keynes, claro, pero oye).
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 00:58 (4)
¿Y que se opuso al levantamiento de precios de Erhard? Creo que cofundes casualidad con causalidad.
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 01:01 (5)
egocrata: perdón, no quiero sonar tosco, pero ¿de qué demonios hablas? Europa en ruinas iba a levantarse. Los keynecios simplemente lo hicieron más lento y doloroso...
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 07:48 (6)
Duro artículo rallo como no iba a ser menos, en cualquier caso esclarecedor del estilo de este caballerete a sueldo.
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 14:43 (7)
Si se hubieran seguido las recomendaciones de Galbraith, Europa pertenecería actualmente en el tercer mundo, con razón Erhard y Ropke actuaron a escondidas para liberarse del corse regulador de los aliados.
Enviado por el día 3 de Mayo de 2006 a las 21:06 (8)
Corsé.
Enviado por el día 4 de Mayo de 2006 a las 00:11 (9)
"Si se hubieran seguido las recomendaciones de Galbraith, Europa pertenecería actualmente en el tercer mundo, con razón Erhard y Ropke actuaron a escondidas para liberarse del corse regulador de los aliados."

Hablando de ir a escondidas. Galbraith presumía en un libro (no recuerdo cuál) que la política del New Deal se pudo implementar gracias a que se engañó al electorado. La fatal arrogancia del ungido, paternalismo "por nuestro bien". Y luego farda el tío. Son mala gente, de lo peor.
Enviado por el día 4 de Mayo de 2006 a las 07:34 (10)

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