25 de Mayo de 2008
« Ya se puede volver a comentar | Principal | Los márgenes de los minoristas siguen cayendo »
Bitácora de Juan Ramón Rallo Julián
Alquimia económica
Increíble que todavía haya gente (ignorante) que siga apostando por esto:
Traducido: impedir que la gente gaste su dinero como quiera, que trabaje menos y cobre más, que el ahorro se hunda y que las estructuras productivas se petrifiquen son la mejor manera de crear riqueza. Toma del frasco, carrasco.Die Linke propaga un programa de inversiones de futuro de 50.000 millones de euros, bajar de 67 a 60 años la edad de jubilación y un sueldo mínimo de 10 euros la hora. Para financiar estas propuestas, propone subir los impuestos a los ricos y a las grandes empresas. También cree que hay que prohibir los despidos masivos en empresas que tengan beneficios.
Comentarios
No, no Rallo: no es increíeble. Es lógico. Ser socialista es más fácil o más asequible que no serlo. El problema surge de nuestras insatisfacción ante el mercado, que no es jauja. Como no es jauja, se quiere arreglar. Al arreglarlo se empeora, pero siempre hay a quien echarle la culpa, normalmente al mercado también y se sigue en el invento. Puesto que la libertad es insatisfactoria porque no resuelve la aspiración al paraíso, siempre se cree en entelequias como "otro mundo es posible" o "debajo del asfalto está la playa". Aspirar al mundo feliz es hermoso, satisfactorio e inspirador de cantantes, poetas y chés, hasta el punto de crear belleza sin igual. Círculo vicioso que crea nuevos adeptos. De ahí que la explicación de por qué no funcionan los mecanismos socialistas/intervencionistas sea tan difícil y por lo que, piensa uno, la mayor contribución que pueden hacer los Juanes de Marianas y otros que aspiren a lo mismo es a hacerlo entendible y asequible, a convertir la razón en persuasión. Qué gran asignatura pendiente.
Berlín. Me asombras. Lo digo sin una gota de ironía. Con semejante base, eso lo suscribiría Losantos palabra por palabra, es alucinante que tantas veces acabes sacando las conclusiones equivocadas.
No se admiten ya más comentarios.