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1 de Julio de 2009

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Todo un hombre de Estado
Bitácora de Juan Ramón Rallo Julián

Supercherías keynesianas

Egócrata describe en esta anotación el argumentario típico de los keynesianos. Básicamente:

- El Estado tiene que gastar mucho para compensar la caída de la demanda privada.
- Si el Estado se endeuda al 1% y la economía crece, el Estado gana dinero.
- Un 60-70% de deuda sobre el PIB no debe preocuparnos y no lastra la economía.
- A medio plazo los enormes déficits de España son imprescinibles para intentar controlar la espiral deflacionista.
- Los inversores no tienen oportunidades mejores de inversión que la deuda pública.
- Al final, toda la gentil actuación del Estado puede fracasar si la contracción crediticia sigue su curso.

Krugman se quejaba en un reciente post de que los economistas tendían a simplificar por no considerar la existencia de tres mercados: dinero, bonos y bienes. Serán los economistas que él conoce, claro. Lo grave, sin embargo, es que esa brutal simplificación que denuncia es la misma que aplica a su modelo: sólo existe algo que sea dinero (no considera la posibilidad de monetizaciones y desmonetizaciones parciales); sólo existe un mercado para los bienes de capital (como si todos fueran homogéneos, perfectamente reconvertibles y divisibles y carecieran de jerarquía y complementariedades) y sólo existe un mercado de bienes y servicios (cuya composicion se antoja poco relevante... por algo estamos en macro). Ya expliqué en su momento que este tipo de análisis no sirven de nada porque no tienen nada que ver con la realidad.

Y mucho me temo que las prescripciones políticas que de ahí se deriven tampoco servirán de nada. Se queja Egócrata de que tras el pinchazo de la burbuja la demanda agregada ha caído. Hombre, es una cuestión muy simple. Los promotores podían antes comprar MUCHO porque sus 800.000 pisos tenían salida (precisamente por ser una burbuja con esquema Ponzi); hoy como su producción no tiene salida tampoco pueden demandar. Tres cuartos de lo mismo sucede con los bancos, si tu capacidad para demandar (esto es, para conceder crédito y que otros demanden) dependía de la generación de riqueza en unos sectores muy concretos de la economía (construcción) y ahora se comprueba que esos sectores son ruinosos, su demanda (crédito) forzosamente cae.

¿Qué hay que hacer? Los keynesianos no se dan cuenta (muchos ni siquiera quieren darse cuenta porque tendrían que abandonar sus esquemas cuadriculados) de que con una estructura productiva dirigida a producir pisos, sólo queda asumir que nos hemos equivocado, que toca asumir pérdidas (no teníamos ninguna gallina de los huevos de oro) y que hay que readaptarse (consumir menos, porque somos menos ricos y porque tenemos que ahorrar para poder invertir en nuevas empresas). Su idea es otra: aquí no es necesario que se adapte nada, porque como el capital (K) tiene una misma naturaleza, sólo tiene que reasignarse y reorientarse de unos sitios a otros. Lo único relevante es mantener el valor del capital generando unas expectativas esperanzadoras que no fuercen a la gente a desinvertir, dejar de consumir y atesorar el dinero bajo el colchón.

¿Cómo? Pues si los ciudadanos tienen miedo y están saliendo de su estado de burbuja, ¡qué el Estado nos mantenga en la fiesta! Gastemos y gastemos para que nadie se dé cuenta de que es más pobre (eso sí, con cargos a deuda pública, esto es, unos supuestos ingresos futuros que ya veremos si alguna vez se producen), estabilicemos demandas (pobres promotores, pobres bancos, pobres períodicos de papel, pobres automovilísticas... si su mercancía sigue siendo igual de buena que hace tres años, ¿por qué nadie la compra compulsivamente?) y, sobre todo, evitemos que caigan los precios de los activos y de los bienes de consumo, ya que ello generaría espirales deflacionistas que son lo peor que puede haber. Con un poco de suerte, pasaremos de una burbuja a otra, esto es, de producir unos bienes completamente inútiles a producir otros también completamente inútiles y todo en nombre de la prosperidad y el bienestar humano. ¿Qué haríamos sin burbujas? ¿Cómo saldríamos de este funesto equilibrio con desempleo al que tiende la desdichada organización humana capitalista?

Dos simples comentarios sobre las políticas anteriores, uno de contabilidad y otro de finanzas. Primero, si el valor de tu activo cae, eres más pobre. Puedes llevar la pérdida a libros o no; la diferencia es a quién engañas, pero no cambias la naturaleza de tu ruinoso negocio (que se lo digan a Enron). Frente a esto, incrementar tus deudas no parece la opción más inteligente, sobre todo si las destinas a gastos corrientes. Un incremento de los pasivos también equivale a un empobrecimiento de mi situación patrimonial. ¿En serio creemos que resulta positivo recibir dos mazazos, uno por el lado del activo y otro por el del pasivo? Segundo, a precios que ya se sabe inflados nadie invierte (salvo los especuladores a quienes les vaya mucho la marcha). Simplemente porque se sabe que el crédito y el gasto forzado no pueden sostener precios artificiales de manera permanente. No hay excepción. Los precios han de caer precisamente para que se genere lo que Benjamin Graham denomina "margen de seguridad", esto es, precios lo suficientemente bajos como para eliminar un ulterior riesgo bajista a largo plazo. La bolsa no ha subido casi un 50% desde marzo porque el Estado se haya puesto a comprar acciones, sino porque en marzo se alcanzaron precios ridículamente bajos como para no entrar en el mercado.

Y si los precios no caen, ¿cómo vamos a generar nuevas oportunidades de inversión? ¿Quién compra un inmueble a PER 25 cuando sabe que le queda una caída de alrededor del 30%? Es que resulta simplemente suicida: es bastante probable que si cualquier empresa se come esa pérdida, acabe descapitalizada.

Lo único seguro es la deuda pública, se dice, y aparentemente eso no nos debe preocupar porque el Estado se financia "gratis" y porque es lo que toca hacer ahora mismo. Entiendo que a los aficionados a las burbujas como base del crecimiento, les parezca fantástico que se generen burbujas en la deuda pública. Si nos fijamos, lo único que realmente se ha abaratado es la financiación a corto plazo del Estado:



Dicho de otra manera, el Estado tiene muy poderosos incentivos a ir concentrándose en los vencimientos más cortos de la deuda (como, por cierto, predecía aquí muy correctamente Antal Fekete) y cuanto más bajos estén los tipos de interés, más cortos tenderán a ser esos vencimientos (invertir a 20 años al 1% es desastroso, ya que un mínimo repunte de los tipos te erosiona casi todo el capital). Así pues, se endeuda a corto e invierte a largo. ¿No hay de qué preocuparse? Algunos confunden financiarse gratis con gastar gratis; una cosa es que no nos cobren casi intereses por el crédito y otra que no haya que devolver ese crédito. Es cierto que niveles del 60% o 70% de deuda son sostenibles, siempre y cuando la economía vuelva a crecer. Lástima que el gasto público financiado con deuda nos empobrezca (simple contabilidad) e impida el reajuste para volver a crecer. Y si no volvemos a crecer, lo normal es que te pase como en Japón:



E incluso un Japón en el mundo es sostenible si el resto de países tienen las finanzas saneadas. Pero, ¿qué sucede cuando todos están empantanados? ¿Es sostenible que todo el mundo tenga deudas públicas del 100% sobre el PIB? Pues no, y entonces es cuando viene la quiebra de algún país o sistema financiero que "frustra" todo el abnegado esfuerzo de los economistas keynesianos y cuando estos nos dicen: "Estuvimos a punto de lograrlo, lástima que tuviéramos mala suerte y quebrara tal país". Lo dicho, en lugar de ciencia, tiran las cartas.

Comentarios

 
Me acabo de empezar a leer un libro que se llama The Storm: The World Economic Crisis & What it Means escrito por Vince Cable, el portavoz de economía del partido liberal-democrat aquí en el Reino Unido.

En la introucción da la siguiente cita de Das Kapital: "Owners of capital will stimulate the working class to buy more and more [...] until their debt becomes unbearable. The upaid debt will lead to bankruptcy of banks, which will have to nationalised, and the State will have to take the road which will eventually lead to communism".

Mi propósito no es hacer la gracia de citar a Marx en el blog de Rallo. Me parece curioso qué bueno es el análisis. Sólo falta sustituir la última palabra (comunismo) por bancarrota total, aunque gracias a nuestra experiencias durante el siglo XX ya sabemos que esos términos son sinónimos.
Enviado por el día 1 de Julio de 2009 a las 17:52 (1)
Tengo entendido que esa cita de Marx es en realidad falsa.
Enviado por el día 1 de Julio de 2009 a las 23:00 (2)
Rallo prestar a largo es equiparable al pago de nomina salarial publica?. Prestar a largo significa en estructuras de capital de largo plazo, que involucran factores, entre ellos mano de obra, digo.. el estado cuando financia gasto corriente con emisiones de corto plazo (En argentina hoy la principal fuente de financiamiento estatal para cubrir el déficit son pagarés a 180 días) no esta "endeudandose a corto y prestando a largo"¿?, porque esa estructura de gasto corriente dificilmente sea flexibilizada con las necesidades de flujo positivo de caja para pagar la deuda contraída de corto, que terminará claro en alguna especie de roll over "permanente", socavando aún mas la situación patrimonial estatal.

Ante esto, ¿hay algun metodo financiero para estimar los niveles de riesgo patrimonial?..

Enviado por el día 2 de Julio de 2009 a las 02:15 (3)
por cierto Rallo, deberías de escribir un pequeño paper sobre la tesis del mercado ausente laboral keynesiano. Con lo que yo te leí y la manera con que lo haces podrías plantear un debate donde hoy particularmente nadie lo debate. Los economistas de bancos importantes dicen que la tendencia del mercado laboral es funcional dependiente de esa variable llamada, empleo. Y tus intervenciones sobre krugman y esta sobre el mercado de bienes esclarecen mucho el panorama. Piénsalo, en Argentina serías ciertamente revolucionario ese planteo ;D

saludos!
Enviado por el día 2 de Julio de 2009 a las 10:14 (4)
bsanchez, si sabes un poco de la teoría marxista te darás cuenta de que esa frase no puede pertenecer a El Capital en la vida. ¿Que la clase trabajadora compre más y más? Teóricamente la clase trabajadora cada vez podría comprar menos, no más. Y si coges la cita completa, habla de que les incitarán a comprar "casas y productos de alta tecnología". ¿Qué trabajador compraba una casa en el siglo XIX?

Lo que es triste es que Cayo Lara, máximo dirigente de IU, citase esa frase en una reunión del partido, como queriendo argumentar que "ya lo decíamos nosotros". Que el líder de los comunistas lea esa frase y no le chirríe demuestra que no tiene ni puñetera idea del pensamiento del fundador de su ideología.
Enviado por el día 2 de Julio de 2009 a las 17:10 (5)
Por algún motivo, mi blog no cazó el trackback de tu respuesta - y una semana que no te leo, me citas. Escribo algo mañana, si tengo tiempo.

Por cierto, ahora ya tengo nombre :-). (aunque a mi viejo nick le tengo un montón de cariño)
Enviado por el día 7 de Julio de 2009 a las 04:52 (6)

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