2 de Diciembre de 2008

Qué cosa... No sé si es más grotesca que siniestra o al revés.

Nazis sin sentido del ridiculo.

Bueno... es una forma de decirlo.

Ya me gustaría a mi que el PP defendiera no sólo al castellano sino la libertad de usar cualquiera de las dos lenguas y respondiera ante estas acciones criticándolas y defendiendo el derecho de las personas a llamarse como les dé la gana.

¿Quién es la Generalidad para decidir cómo se tienen que llamar los individuos?

Oigan... los del PP?? ¿algo que deciiir?

¡¡¡¡Madre del amor hermoso!!!!

¡Yo me llamo Josep Lluis aquí y en la China!

Bueno ¿y cómo es que nombran funcionarios o conceden el traslado a personas que no existen? porque está claro que uno se llama como pone en su DNI, no como le da la gana al nacionalista de turno.

Antología del disparate, parte enésima