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29 de Junio de 2004

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La Hora de Todos
Bitácora de José Carlos Rodríguez

Contra la filantropía

Neil Levy, de la Charles Stuart University en Wagga Wagga, Australia, ha escrito un artículo en el que se opone a la filantropía. A la privada, claro, porque no hay otra. ¿El motivo? Que la alternativa a la filantropía es el Estado, y a medida que crece la primera, le roba el papel y la justificación al segundo. Los males no acaban aquí. La filantropía expone a los necesitados a las visicitudes del mercado.

Tan estupefaciente como suena. Más información aquí.

Comentarios

 
¿Y qué esperabas que dijera alguien de una universidad situada en Wagga Wagga?
Enviado por el día 29 de Junio de 2004 a las 20:22 (1)
Ya, es todo un poco de cogna
Enviado por el día 29 de Junio de 2004 a las 20:35 (2)
Este debate es interesante sobre todo cuando se legisla respecto a que cantidad debe desgravarse una empresa o un particular por las donaciones entregadas a estas fundaciones o asociaciones.
En primer lugar,el Estado no establece distincion entre publicas y privadas(se admite donaciones y acuerdos de colaboracion con universidades publicas en "igualdad" con las privadas) pero si hace diferencias entre destinarios concretos como cruz Roja,Comite Olimpico ,Instituto Cervantes a las que da mas ventajas.
Es facilmente demostrable que el Estado le preocupa dejar de recaudar mas que el mayor o menor beneficio de la sociedad.Si de verdad le interesase este beneficio aumentaria la desgravacion y simplemente fiscalizaria mas el uso de los fondos,pero eso significaria perder poder(en educacion,sanidad,cultura etc) frente a multitud de organizaciones.
En España ademas eso de "sin animo de lucro" parece, per se, un marchamo de honorabilidad que nunca he entendido del todo frente al beneficio empresarial que parece algo propio de explotadores sin escrupulos,aunque paradojicamente es imprescindible para que existan donaciones.
Enviado por el día 29 de Junio de 2004 a las 20:59 (3)
Se me olvidaba decir que efectivamente ,por la izquierda se prefiere el gasto social que hace el Estado al que puedan hacer esas organizaciones.Aunque a veces,esas organizaciones funcionan a base de subvenciones con lo que ,para ese viaje...
La Iglesia Catolica ,seria un caso aparte, debido a los acuerdos preconstitucionales firmados por Franco con la Santa Sede.Pero no lo criticare aqui ,eso seria propio de rojos anticlericales...¿No?
Enviado por el día 29 de Junio de 2004 a las 21:04 (4)
Pues no, ahí tienes razón, la ley debe ser igual para todos, aportaciones voluntarias, no es porque no sea religioso, es porque soy liberal, que cobren por sus servicios y soliciten donaciones, pero para los demás también.
Ser rojo anti-clerical es matar o quemar, que la iglesia se financie como todo hijo de vecino, es decir con su trabajo o con donaciones es liberal.
Enviado por el día 29 de Junio de 2004 a las 21:52 (5)
La nueva izquierda se está realmente empeñando en eso poner sus fines en concordancia con sus medios. Primero nos dicen que hay que producir menos, no más, y distribuir equitativamente la miseria creciente por razones ecológicas. Producir miseria y distribuirla equitativamente es algo en lo que han demostrado una superioridad indiscutible los estatistas. Pero ese asunto incluye una mentira, ya que producir menos implica contaminar más, no lo contrario. Admirable en cambio es este caso nuevo, en el que se comienza por reconocer que todo el asunto de la redistribución de la riqueza y la solidaridad no tiene importancia alguna para ellos, que lo que les importa es concentrar recursos, capital, capacidades.. en fin, poder, en el estado. La solidaridad es buena, si sirve para hacer al estado poderoso, sino, es mala. Tanta sinceridad es interesante.
Pero hay algo más interesante, pues no existe justificación alguna para los desgrávamenes en impuestos de capitales empleados en la caridad. La caridad no es una función del estado, y por ello no se justifica, ni que la practique, ni que la subvencione directa o indirectamente. Lo que se tendría que desgravar es lo que los particulares nos vemos obligados a gastar directa y privadamente en seguridad, justicia y obras públicas, porque el estado ocupado en lo que no le es propio, no nos las proporciona adecuadamente.
Enviado por el día 30 de Junio de 2004 a las 02:31 (6)
Me parece que el asunto de la filantropía frente al gasto social es más una cuestión de percepción que otra cosa.

Aquellos que favorecen la idea de que es el estado el que debe resolver todos los problemas de todos, piensan en definitiva que el ser humano está desamparado y es incapaz por sí mismo de resolver nada a no ser que un ente benéfico y todopoderoso lo haga por ellos.

Aquellos que están a favor de las iniciativas filantrópicas, lo basan en la idea de capacidad personal, de ver algo que necesita cambiarse y cambiarlo.

Son percepciones distintas: súbditos frente a ciudadanos.
Enviado por el día 4 de Julio de 2004 a las 17:56 (7)

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