27 de Abril de 2006
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Bitácora de José Carlos Rodríguez
Las Vascongadas, entre Navarra y Castilla
Los asesinos de ETA, que están encantados con el cheque en blanco que les firma Rodríguez, siguen sin renunciar a Navarra, como al resto de sus objetivos políticos.
Para darles un poco en las narices a los nacionalistas, para contar lo esencial de la historia de Navarra y su relación con las provincias Vascongadas, he escrito en LD un breve reportaje. Mañana seguramente añadiré algo.
Me baso en Ricardo de la Cierva y en especial en Claudio Sánchez-Albornoz, el gran medievalista español. Le cito ampliamente en su excelente Vasconia, o la España sin romanizar. Más que mi breve síntesis, os recomiendo vivamente el artículo de Sánchez-Albornoz.
Para darles un poco en las narices a los nacionalistas, para contar lo esencial de la historia de Navarra y su relación con las provincias Vascongadas, he escrito en LD un breve reportaje. Mañana seguramente añadiré algo.
Me baso en Ricardo de la Cierva y en especial en Claudio Sánchez-Albornoz, el gran medievalista español. Le cito ampliamente en su excelente Vasconia, o la España sin romanizar. Más que mi breve síntesis, os recomiendo vivamente el artículo de Sánchez-Albornoz.
Comentarios
Hola.
Te recuerdo que en la UPV los etarras aprueban sin hacer un sólo examen. Por lo tanto cómo quieres que sepan lo más mínimo de historia.
Un saludo A.
Te recuerdo que en la UPV los etarras aprueban sin hacer un sólo examen. Por lo tanto cómo quieres que sepan lo más mínimo de historia.
Un saludo A.
Nada, ni la étnia, ni la historia, ni el carácter, separan a los vascos del resto de españoles. Ni siquiera la lengua éuscara, pues es la lengua propia sólo de una parte de los vascos de abolengo.
Queda sin fundamento intelectual alguno la voluntad de poder que expresan tan contundente y reiteradamente los nacionalistas de aquellas tierras. Aparecen así como un grupo pertinaz en su empeño, tan radical como falto de raíz (probablemente porque una cosa necesita de la otra).
Queda sin fundamento intelectual alguno la voluntad de poder que expresan tan contundente y reiteradamente los nacionalistas de aquellas tierras. Aparecen así como un grupo pertinaz en su empeño, tan radical como falto de raíz (probablemente porque una cosa necesita de la otra).
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