Hispanoamérica
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el corralito cubano
Enviado por el día 5 de Marzo de 2004 a las 06:12
Amigos mios, a todos lo que culpan al liberalismo de la reciente crisis argentina (aunque el propio gobiermo de De la Rua se proclamó como "tercera vía") quisiera que compararan esta lamentable situaciòn con otra del paraìso cubano del "patriota" Fidel Castro
"Una mañana de mediados de agosto (de 1961) apareciò en los diarios una noticia sobrecogedora.El papel moneda circulante carecia de valor desde ese día ; sería reemplazado por un nuevo billete.Se cambiba el dinero en todos los bancos y ademàs se habian habilitado numerosas oficinas públicas y locales comerciales con ese propòsito.Pero lo demoledor de esta medida que sólo se podìan cambiar 200 pesos en efectivo, previa identificaciòn , estampar huellas dactilares, domicili comprobado y sede de su trabajo.Si alguien era sorprendido cambiando dinero en dos partes, serìa condenado a diez años de cárcel.Pasadas 48 horas, nadie podia tener los billetes antiguos, bajo pena de encarcelamiento.
Respecto de las cuentas bancarias, se respetarìa hasta la cantidad de diez mil pesos; lo demás pasaría al Estado.
Esta drástica medida no afectó al rico; la mayoría ya había emigrado o llevado sus fondos al extranjero.Pero fue desastrosa para la clase media y trabajadora
(...) Desde el amanecer se formaron interminables colas en los lugares de trabajo; la mayoría de la gente tuvo que estar cerca de 24 horas al rayo del sol, con una temperatura de más o menos 40 grados centigrados.Los ataques de nervios y los desmayos fueron por millares (...) Una anciana gorda lloraba desconsoladamente, contando a quien la queria oir que habia trabajado de cocinera en una fonda durante 25 años, soñando con regalarle una casita a sus hijos o a sus nietos.Ahora que estaba a punto de hacerlo, con dinero ahorrado centavo a centavo, su capitalito, qe era de 17.800 pesos, quedaba reducido a 200 pesos (...) La gente de edad o escasa preparación desconfiaba de los bancos, pues en "la Moratoria" de 1920, habían quebrado todos.
(...) Los milicianos sacaban de la fila a quienes traian paquetes grandes y los arrestaban
(...) Respecto de las cuentas bancarias,que podían ser de hasta diez mil pesos, pronto la gente se convenció que era un valor puramente nominal (...) Si el estado estimaba que era necesaria la inversión, se le entragaba el dinero; otras veces rechazaba el giro.Como la mayoría de las personas necesitaban dinero para comprara productos en la bolsa negra, no tenian como justificar el giro"...
Extracto del Libro "Cuba Azúcar Amarga", de David González Guajardo, 1966, págs.151-153.
Bueno, para defenderse del corralito al menos en Argentina exitía el habeas corpus.
"Una mañana de mediados de agosto (de 1961) apareciò en los diarios una noticia sobrecogedora.El papel moneda circulante carecia de valor desde ese día ; sería reemplazado por un nuevo billete.Se cambiba el dinero en todos los bancos y ademàs se habian habilitado numerosas oficinas públicas y locales comerciales con ese propòsito.Pero lo demoledor de esta medida que sólo se podìan cambiar 200 pesos en efectivo, previa identificaciòn , estampar huellas dactilares, domicili comprobado y sede de su trabajo.Si alguien era sorprendido cambiando dinero en dos partes, serìa condenado a diez años de cárcel.Pasadas 48 horas, nadie podia tener los billetes antiguos, bajo pena de encarcelamiento.
Respecto de las cuentas bancarias, se respetarìa hasta la cantidad de diez mil pesos; lo demás pasaría al Estado.
Esta drástica medida no afectó al rico; la mayoría ya había emigrado o llevado sus fondos al extranjero.Pero fue desastrosa para la clase media y trabajadora
(...) Desde el amanecer se formaron interminables colas en los lugares de trabajo; la mayoría de la gente tuvo que estar cerca de 24 horas al rayo del sol, con una temperatura de más o menos 40 grados centigrados.Los ataques de nervios y los desmayos fueron por millares (...) Una anciana gorda lloraba desconsoladamente, contando a quien la queria oir que habia trabajado de cocinera en una fonda durante 25 años, soñando con regalarle una casita a sus hijos o a sus nietos.Ahora que estaba a punto de hacerlo, con dinero ahorrado centavo a centavo, su capitalito, qe era de 17.800 pesos, quedaba reducido a 200 pesos (...) La gente de edad o escasa preparación desconfiaba de los bancos, pues en "la Moratoria" de 1920, habían quebrado todos.
(...) Los milicianos sacaban de la fila a quienes traian paquetes grandes y los arrestaban
(...) Respecto de las cuentas bancarias,que podían ser de hasta diez mil pesos, pronto la gente se convenció que era un valor puramente nominal (...) Si el estado estimaba que era necesaria la inversión, se le entragaba el dinero; otras veces rechazaba el giro.Como la mayoría de las personas necesitaban dinero para comprara productos en la bolsa negra, no tenian como justificar el giro"...
Extracto del Libro "Cuba Azúcar Amarga", de David González Guajardo, 1966, págs.151-153.
Bueno, para defenderse del corralito al menos en Argentina exitía el habeas corpus.