Hispanoamérica
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El Comunismo y el Socialismo, ideologías fracasadas...
Enviado por el día 11 de Noviembre de 2005 a las 00:15
El fracaso de las dos ideologías está en el mito de la igualdad humana. Somos iguales espiritualmente, pero en la sociedad no es posible, puesto que todos tenemos funciones distintas que cumplir... ¿Cuál es ese afán de querer salirse de lugar? El comunismo, basado en esa mentira, creó una casta privilegiada: La nomenklatura... Luego, el pueblo vive en hambre y pobreza, como en Cuba, donde Castro es el único rico. Los Hare Krishnas tienen razón en eso... http://www.iskcon.net/peru/varnashrama.htm
Re: El Comunismo y el Socialismo, ideologías fracasadas...
Enviado por el día 11 de Noviembre de 2005 a las 00:17
"La idea de que todos son iguales simplemente no es verdad. Somos iguales solamente desde el punto de vista espiritual, pero no materialmente. Es solo un inútil idealismo pensar lo contrario, y decir que las personas son diferentes no significa que uno sea mejor que otro, de la misma forma que no podemos decir que, en el cuerpo, los brazos son mejores que las piernas, o que la cabeza es más importante que el estómago. Con el propósito de buscar esa supuesta igualdad, todo tipo de errores han sido cometidos por nuestra sociedad. El comunismo, que llevó esta idea más lejos, fue un gran fracaso. El actual concepto de igualdad en occidente ha traído, entre otras cosas, la creciente desigualdad social, un sinnúmero de excluidos que viven a la vera de una sociedad que intenta ignorarlos, y un sistema de gobierno claramente incapaz de poner a cargo del liderazgo a los más calificados."
Re: Re: El Comunismo y el Socialismo, ideologías fracasadas...
Enviado por el día 11 de Noviembre de 2005 a las 19:37
Tampoco espiritualmente somos iguales. No se puede comparar, por ejemplo, el alma exquisita de un santo con la de un asesino, ni el espìritu diáfano de un héroe con el de un corrupto. Definitivamente NO somos iguales.
Cristo no dijo que éramos iguales. Dijo que éramos hermanos, que es muy diferente.
Que tengamos todos los humanos un origen común y compartamos todos características genéticas generales y básicas, no hace que seamos iguales. NADIE ES IGUAL A OTRO, ni siquiera los gemelos. Habría que aprender a aceptar la diversidad dentro de la unidad, en vez de pretender homogenizar forzosamente a todo mundo.
En honor a la verdad, tampoco el socialismo y el comunismo dicen que todos seamos iguales: dicen que la clase obrera, por ser productora y mayoritaria (en el siglo XIX), es la más capacitada para gobernar. Es verdad que en comunismo pretendía, en su última etapa, borrar todas las clases sociales, pero eso nunca fue una realidad histórica, sino que era una especie de "Tierra Prometida" que nunca se llegó a concretar.
Así pues, la proclamación del disparate que "todos somos iguales" se remite más bien a la Declaración de los Derechos del Hombre con su consigna: "Libertad, fraternidad, IGUALDAD". Sin embargo, no se especifica aquì a que "igualdad" se refiere, porque una cosa es que todos tengamos los mismos derechos, y otra muy diferente es que todos seamos iguales en nuestra naturaleza y caracter. Pero yo creo que de ahí deriva toda la confusión y el relajo mundial que ha traído como consecuencia.
Cristo no dijo que éramos iguales. Dijo que éramos hermanos, que es muy diferente.
Que tengamos todos los humanos un origen común y compartamos todos características genéticas generales y básicas, no hace que seamos iguales. NADIE ES IGUAL A OTRO, ni siquiera los gemelos. Habría que aprender a aceptar la diversidad dentro de la unidad, en vez de pretender homogenizar forzosamente a todo mundo.
En honor a la verdad, tampoco el socialismo y el comunismo dicen que todos seamos iguales: dicen que la clase obrera, por ser productora y mayoritaria (en el siglo XIX), es la más capacitada para gobernar. Es verdad que en comunismo pretendía, en su última etapa, borrar todas las clases sociales, pero eso nunca fue una realidad histórica, sino que era una especie de "Tierra Prometida" que nunca se llegó a concretar.
Así pues, la proclamación del disparate que "todos somos iguales" se remite más bien a la Declaración de los Derechos del Hombre con su consigna: "Libertad, fraternidad, IGUALDAD". Sin embargo, no se especifica aquì a que "igualdad" se refiere, porque una cosa es que todos tengamos los mismos derechos, y otra muy diferente es que todos seamos iguales en nuestra naturaleza y caracter. Pero yo creo que de ahí deriva toda la confusión y el relajo mundial que ha traído como consecuencia.
