Hispanoamérica
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Un apagón de argolla
Enviado por el día 14 de Febrero de 2006 a las 23:22
Jorge Hernández Fonseca
www.penhacubana.com
From: Ciudadanodesegunda@Cubaquesufre.com.cu
To: Fidel_Castro@Cubaqueoprime.com.cu
Sent: Domingo, 22 de Enero de 2006
Subject: "Un apagón de argolla"
Comandante:
Tiene que ver bien a quien pone de nuevo ministro de energía en la isla. Mira que darle un apagón de argolla, de aquellos que hacen época, precisamente el día que Ud. iba a hablar de la Revolución Energética, o es cosa del imperialismo o mucha incompetencia.
Si fuera preparado por el imperialismo, habría que fusilar culpables. Si fusilamos jóvenes na´má por querer escapar de Cuba, un sabotaje de estos, el día de su comparecencia para explicar los logros de la futura revolución energética, merece futuros fusilamientos.
Claro, nuestro aguerrido y sacrificado pueblo trabajador comprende que todavía no había tiempo para cumplir la meta que Ud. había prometido como fecha límite para que a partir de allí, no hubiera más apagones. Los fuertes vientos reinantes en la Habana, unidos a otras fallas que no dependieron de su voluntad, se conjugaron para dar este apagonazo.
Pero no importa, libraremos esa nueva batalla, primero librándonos del ministro incompetente y después comprando muchas velas. Yo me acuerdo cuando una simple falla de mantenimiento le costó el cargo al anterior ministro, incluso sin haber revolución energética de por medio, me imagino ahora que le han hecho hacer tremendo papelazo.
Dicen periodistas malintencionados que Ud. no fue a toma de posesión de Evo Morales en Bolivia para no tener que dar razones a la prensa internacional sobre el ridículo que ha hecho con lo de anunciar la revolución energética y sufrir después tremendo apagón.
Lo que ellos no saben es que el problema no ese, porque Ud. nunca huyó de un combate, la cosa es más simple, asociado a los problemas del alma,… ¡del almanaque! Supimos que los equipos médicos que Ud. necesita pa’mantenerse en pie casi no cabían en el avionazo que compró en Rusia (pagado por Chávez) y en Bolivia no había en tierra nada parecido “porsia”, y iba a tener que quedarse en el avión sin ir a palacio pa’lacto.
Pero no importa. El carisma de Lage suplió su ausencia, que en adelante compensaremos mandando médicos cubanos a Bolivia, porque como a nosotros no sobran, ellos irán a dar salud al pueblo boliviano y de paso traer divisas pa’comprar plantas eléctricas portátiles.
Leí en su discurso que la revolución energética está basada en un plan inédito en el mundo, que vendrá asombrado a ver nuestros logros. Escuché decir que pondremos una planta eléctrica en cada cuadra, administrado por el Comité de Defensa pa’poder alumbrar cada barrio, y que pondremos una conexión entre los barrios pa’cuando haya problema en alguno de ellos, que los otros suministren luz al hermano en desgracia.
www.penhacubana.com
From: Ciudadanodesegunda@Cubaquesufre.com.cu
To: Fidel_Castro@Cubaqueoprime.com.cu
Sent: Domingo, 22 de Enero de 2006
Subject: "Un apagón de argolla"
Comandante:
Tiene que ver bien a quien pone de nuevo ministro de energía en la isla. Mira que darle un apagón de argolla, de aquellos que hacen época, precisamente el día que Ud. iba a hablar de la Revolución Energética, o es cosa del imperialismo o mucha incompetencia.
Si fuera preparado por el imperialismo, habría que fusilar culpables. Si fusilamos jóvenes na´má por querer escapar de Cuba, un sabotaje de estos, el día de su comparecencia para explicar los logros de la futura revolución energética, merece futuros fusilamientos.
Claro, nuestro aguerrido y sacrificado pueblo trabajador comprende que todavía no había tiempo para cumplir la meta que Ud. había prometido como fecha límite para que a partir de allí, no hubiera más apagones. Los fuertes vientos reinantes en la Habana, unidos a otras fallas que no dependieron de su voluntad, se conjugaron para dar este apagonazo.
Pero no importa, libraremos esa nueva batalla, primero librándonos del ministro incompetente y después comprando muchas velas. Yo me acuerdo cuando una simple falla de mantenimiento le costó el cargo al anterior ministro, incluso sin haber revolución energética de por medio, me imagino ahora que le han hecho hacer tremendo papelazo.
Dicen periodistas malintencionados que Ud. no fue a toma de posesión de Evo Morales en Bolivia para no tener que dar razones a la prensa internacional sobre el ridículo que ha hecho con lo de anunciar la revolución energética y sufrir después tremendo apagón.
Lo que ellos no saben es que el problema no ese, porque Ud. nunca huyó de un combate, la cosa es más simple, asociado a los problemas del alma,… ¡del almanaque! Supimos que los equipos médicos que Ud. necesita pa’mantenerse en pie casi no cabían en el avionazo que compró en Rusia (pagado por Chávez) y en Bolivia no había en tierra nada parecido “porsia”, y iba a tener que quedarse en el avión sin ir a palacio pa’lacto.
Pero no importa. El carisma de Lage suplió su ausencia, que en adelante compensaremos mandando médicos cubanos a Bolivia, porque como a nosotros no sobran, ellos irán a dar salud al pueblo boliviano y de paso traer divisas pa’comprar plantas eléctricas portátiles.
Leí en su discurso que la revolución energética está basada en un plan inédito en el mundo, que vendrá asombrado a ver nuestros logros. Escuché decir que pondremos una planta eléctrica en cada cuadra, administrado por el Comité de Defensa pa’poder alumbrar cada barrio, y que pondremos una conexión entre los barrios pa’cuando haya problema en alguno de ellos, que los otros suministren luz al hermano en desgracia.
Re: Un apagón de argolla
Enviado por el día 14 de Febrero de 2006 a las 23:24
Enseguida me acordé del plan de Mao en China, colocando una fabriquita de acero en los patios de cada casa, y con la suma de todas las pequeñas producciones de acero, ser una potencia mundial. Inexplicablemente ese plan no fue adelante, no se sabe muy bien ¿por qué?, pero el nuestro en Cuba encabezado por Ud., seguramente será un éxito.
Me enteré que había mandado a comprar más de 4,000 planticas eléctricas y que ya habían llegado una 3,500, que enseguida fueron distribuidas a cada CDR. Ese plan es una verdadera revolución, ningún país de Primer Mundo tiene nada parecido, porque ellos hablan de una tal “economía de escala”, que es algo que nadie entiende por acá.
Ahora Comandante, mucho cuidado con esa revolución energética, porque si la otra nos ha dejado sin plumas y cacareando, esta pudiera dejarnos con apagones hasta de día, ya que no es lo mismo “Ud. no va a morirse sin resolver el problema eléctrico” que “es mejor Ud. morirse antes de resolver el problema eléctrico”
Su víctima.
Ciudadano de Segunda.
Me enteré que había mandado a comprar más de 4,000 planticas eléctricas y que ya habían llegado una 3,500, que enseguida fueron distribuidas a cada CDR. Ese plan es una verdadera revolución, ningún país de Primer Mundo tiene nada parecido, porque ellos hablan de una tal “economía de escala”, que es algo que nadie entiende por acá.
Ahora Comandante, mucho cuidado con esa revolución energética, porque si la otra nos ha dejado sin plumas y cacareando, esta pudiera dejarnos con apagones hasta de día, ya que no es lo mismo “Ud. no va a morirse sin resolver el problema eléctrico” que “es mejor Ud. morirse antes de resolver el problema eléctrico”
Su víctima.
Ciudadano de Segunda.