Hispanoamérica

El Benefactor, de puntillosa y psicorigida pulcritud, solia desenvolverse en todos sus actos con la elegancia caracteristica de aquel que es consciente de poseer la autoridad indiscutible e incuestionables... Rubi -el ultimo playboy, el unico latinoamericano que se dio las hembras con las que los demas solo sonarian en sus mas descabellados suenos, dominicano, natural de la cibaena ciudad de san Fco. de Macoris- y el Jefe se profesaban ambos la admiracion propia de quienes se saben por encima de los demas. El Jefe bailaba con elegancia insuperable, cabalgaba con elegancia... pero montaba las hembras y eliminaba a sus adversarios con fruiccion despiadada y glacial... Por eso era, sencillamente, "El Jefe"

Hace años, en mi primera visita a NY, tuve la suerte de encontrarme en el aeropuerto JFK con un centenar de dominicanos reunidos para recibir a un tipo con bigotillo y cara simpática al grito de :

¡¡ruge ruge el León!!

Ese león no era otro que Leonel Fernández, que fue presidente de la república.

Supongo que los tiempos de Trujillo eran otros tiempos.

No lo puedo creer. Estos europeos..

Yo estoy muy contenta con mi diversidad racial y cultural, como todo buen latinoamericano debería hacer (aún siendo blanco).

Orgullosísima de mi mestizaje. Es lo más bello que tenemos.

Que orgullo de mestizaje, diversidad racial y cultural ni que narices vas a tener tu, loquita chaveca; lo que si tienes, sin ningun genero de dudas, es una empanada mental, una arepa familiar-size comprimiendote el cerebro, que te zumba el mango y la manigueta...