Hispanoamérica
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Oda a los ‘policías buenos’
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 15:35
Jorge Hernández Fonseca
www.penhacubana.com
From: Ciudadanodesegunda@Cubaquesufre.com.cu
To: Fidel_Castro@Cubaqueoprime.com.cu
Sent: Jueves, 08 de Junio de 2006
Subject: Oda a los ‘policías buenos’
Comandante:
Me emocioné mucho escuchándolo hablar durante la conmemoración del 45 aniversario de la creación de los servicios de policía, seguridad, cárceles, prisiones, etc., todo en favor de nuestro pueblo. Verdá que no debe haber sido fácil contener a nuestros obreros y campesinos cuando se decía que eramos tan verdes como nuestras palmas y en realidad éramos rojos como el tomate (o como el melón) verde por fuera, pero rojo por dentro.
No es que fuera un engaño, o que Ud. hubiera mentido cuando juró que el gobierno no era comunista. En realidad era una estrategia para ir poco a poco, y por las buenas, de manera a no espantar la paloma y evitar que entrara el enemigo imperialista a meter cizaña entre nuestro aguerrido y sacrificado pueblo trabajador y su vanguardia socialista.
Hoy el pueblo lo agradece, sobre todo porque casi to’el mundo es policía. El que no tiene uniforme es informante y el que no, es cederista, pero todos colaboran con aquellos chivatientes de la pupila insomne para que nunca más regrese a nuestra querida patria los días de empacho con carne’puerco, que tanto daño nos hace con su colesterol.
Lo escuché decir que nuestros queridos policías son los más decentes del mundo, igual que las jineteras son las más educadas del mundo. Al final, ambas categorías trabajan con “el cuerpo”. Ellos con el cuerpo de policía y ellas con el cuerpazo que tienen.
Voy a llevarle el recorte del Granma donde Ud. habla estas cosas buenas de la policía, a un amigo gusano que siempre anda hablando mal de la represión que hay en Cuba, pa’que vea que la decencia de la policía nunca permitiría a un hombrón darle un puñetazo a una mujer mayor e indefensa dentro de su casa, como dice él que ha sucedido.
Cuando él lea lo que Ud. dice respecto a que la policía actúa sin injusticias, va a comprender la mentira que dicen por Radio Martí sobre los presos políticos en huelga de hambre, o sobre los golpes de los actos de repudio, en los que la policía no participa.
Supe que coincidiendo con todo eso se celebró un congreso de intelectuales de Cuba, Venezuela y España. Leí nombres tan valiosos del arte y la literatura palaciega como el de Abel Prieto (preferimos a Caín) respaldando ‘los esfuerzos emancipatorios del pueblo irakí’, precisamente cuando liquidaban al jefe de Al-Queda por allá. ¡Que clase’despiste!
Es mucha desinformación para gentes que usa melenita y que no sale del aire acondicionado. Todavía Ud., que ya se sacrificó todos estos años, tiene derecho ahora al carrazo charolado y a la climatización que merece; pero ellos, que todavía no le han tirado un hollejo a un chino? A quien quieren engañar? ¡Mándelos a cortar caña!
www.penhacubana.com
From: Ciudadanodesegunda@Cubaquesufre.com.cu
To: Fidel_Castro@Cubaqueoprime.com.cu
Sent: Jueves, 08 de Junio de 2006
Subject: Oda a los ‘policías buenos’
Comandante:
Me emocioné mucho escuchándolo hablar durante la conmemoración del 45 aniversario de la creación de los servicios de policía, seguridad, cárceles, prisiones, etc., todo en favor de nuestro pueblo. Verdá que no debe haber sido fácil contener a nuestros obreros y campesinos cuando se decía que eramos tan verdes como nuestras palmas y en realidad éramos rojos como el tomate (o como el melón) verde por fuera, pero rojo por dentro.
No es que fuera un engaño, o que Ud. hubiera mentido cuando juró que el gobierno no era comunista. En realidad era una estrategia para ir poco a poco, y por las buenas, de manera a no espantar la paloma y evitar que entrara el enemigo imperialista a meter cizaña entre nuestro aguerrido y sacrificado pueblo trabajador y su vanguardia socialista.
Hoy el pueblo lo agradece, sobre todo porque casi to’el mundo es policía. El que no tiene uniforme es informante y el que no, es cederista, pero todos colaboran con aquellos chivatientes de la pupila insomne para que nunca más regrese a nuestra querida patria los días de empacho con carne’puerco, que tanto daño nos hace con su colesterol.
Lo escuché decir que nuestros queridos policías son los más decentes del mundo, igual que las jineteras son las más educadas del mundo. Al final, ambas categorías trabajan con “el cuerpo”. Ellos con el cuerpo de policía y ellas con el cuerpazo que tienen.
Voy a llevarle el recorte del Granma donde Ud. habla estas cosas buenas de la policía, a un amigo gusano que siempre anda hablando mal de la represión que hay en Cuba, pa’que vea que la decencia de la policía nunca permitiría a un hombrón darle un puñetazo a una mujer mayor e indefensa dentro de su casa, como dice él que ha sucedido.
Cuando él lea lo que Ud. dice respecto a que la policía actúa sin injusticias, va a comprender la mentira que dicen por Radio Martí sobre los presos políticos en huelga de hambre, o sobre los golpes de los actos de repudio, en los que la policía no participa.
Supe que coincidiendo con todo eso se celebró un congreso de intelectuales de Cuba, Venezuela y España. Leí nombres tan valiosos del arte y la literatura palaciega como el de Abel Prieto (preferimos a Caín) respaldando ‘los esfuerzos emancipatorios del pueblo irakí’, precisamente cuando liquidaban al jefe de Al-Queda por allá. ¡Que clase’despiste!
Es mucha desinformación para gentes que usa melenita y que no sale del aire acondicionado. Todavía Ud., que ya se sacrificó todos estos años, tiene derecho ahora al carrazo charolado y a la climatización que merece; pero ellos, que todavía no le han tirado un hollejo a un chino? A quien quieren engañar? ¡Mándelos a cortar caña!
Re: Oda a los ‘policías buenos’
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 15:37
Ahora Comandante, mucho ojo con todo eso, que la Mafia de Miami dice que no es lo mismo, “los cuerpos de policías suyos son los más decentes del mundo y usan jinetes montados para cuidar la ley y el orden público” que “las jinetas suyas son las más in-decentes del mundo y usan su cuerpo para montarse al público sin ley ni orden” ¡Cuidado!
Su víctima.
Ciudadano de Segunda.
Su víctima.
Ciudadano de Segunda.