Hispanoamérica
Estos foros están cerrados. Podéis debatir en Red Liberal.
tenia armas.....
Enviado por el día 19 de Junio de 2004 a las 02:04
El espionaje ruso calificó de "no objetivo" el informe de la comisión estadounidense que investigó los atentados del 11-S y afirmó que la inteligencia rusa sabía que el Gobierno de Bagdad preparaba actos terroristas en EEUU y había avisado de ello a la CIA norteamericana.
Aunque Rusia fue uno de los mayores críticos de la invasión de Irak, el presidente Vladímir Putin -antiguo espía del KGB soviético y ex jefe de su organismo sucesor, el Servicio Federal de Seguridad ruso- confirmó personalmente esa información sensacional.
"Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EEUU y antes de comenzar la operación militar en Irak, los servicios rusos de inteligencia obtuvieron reiteradamente información al respecto y la transmitieron a sus colegas estadounidenses", señaló Putin.
Explicó que los datos recibidos indicaban que "órganos oficiales del régimen de Sadam planeaban actos terroristas en territorio de EEUU y fuera de sus fronteras, contra objetivos militares y civiles norteamericanos en otros países".
"Esta información se transmitió a los colegas norteamericanos y el presidente Bush dio las gracias personalmente al dirigente de uno de los servicios secretos rusos por esa información, que consideró muy importante", señaló Putin.
La comisión investigadora de los atentados en EEUU concluyó el miércoles que no existen "pruebas creíbles" de vínculos entre Al Qaida y el régimen iraquí, aunque constató que tuvieron contactos.
"Las conclusiones hechas por la comisión no pueden considerarse objetivas, pues no tienen en cuenta otros componentes del problema iraquí y no dan un cuadro completo de la situación en torno a Irak hace dos años", comentó un representante del espionaje ruso.
Agregó que, "al investigar las causas de la crisis iraquí, se deben tener en cuenta todos los aspectos del problema, incluida la amenaza directa que el régimen de Sadam representaba para EEUU".
Pero al ser preguntado Putin si la ocupación de Irak podía considerarse un acto de EEUU en defensa propia, respondió: "No sé. Ese es un tema aparte", y reiteró su rechazo a esa invasión sin el visto bueno del Consejo de Seguridad de la ONU.
"El derecho internacional prevé determinados procedimientos para el empleo de la fuerza en la palestra mundial, y esos procedimientos no se respetaron" en el caso de Irak, manifestó.
Por otro lado, Moscú reanimó el tema de la supuesta existencia de armas de destrucción masiva en Irak, que sirvió de principal pretexto a EEUU para la guerra, y recordó que los expertos internacionales de armas no concluyeron su labor de inspección en el país.
El viceministro de Exteriores ruso, Yuri Fedótov, afirmó que los expertos deben "concluir su trabajo y presentar conclusiones", pues "sólo con su veredicto podrá el Consejo de Seguridad de la ONU cerrar definitivamente el dossier armamentístico iraquí".
"Rusia propone que el Consejo adopte cuanto antes una resolución que revise, teniendo en cuenta las nuevas realidades, el mandato de la comisión de la ONU para la inspección, vigilancia y verificación del desarme de Irak (UNMOVIC) y de la misión del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)", puntualizó.
El objetivo de tal resolución, explicó, es "determinar las nuevas condiciones y marcos jurídicos de la actividad de los inspectores para su eventual retorno a un Irak, donde está en marcha la formación de un Gobierno provisional que representa la soberanía del país".
Además, Rusia intentó quitar hierro a la polémica en el Consejo de Seguridad por la petición de EEUU de prolongar por otro año la inmunidad a sus soldados ante la Corte Penal Internacional, algo que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, consideró que sería "desafortunado" tras los abusos en las prisiones iraquíes.
"No es un asunto sencillo, aunque el Consejo ya lo había aprobado con anterioridad. Nosotros queremos una solución de compromiso, que permita conservar la unidad en el Consejo de Seguridad", dijo Fedótov.
Aunque Rusia fue uno de los mayores críticos de la invasión de Irak, el presidente Vladímir Putin -antiguo espía del KGB soviético y ex jefe de su organismo sucesor, el Servicio Federal de Seguridad ruso- confirmó personalmente esa información sensacional.
"Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EEUU y antes de comenzar la operación militar en Irak, los servicios rusos de inteligencia obtuvieron reiteradamente información al respecto y la transmitieron a sus colegas estadounidenses", señaló Putin.
Explicó que los datos recibidos indicaban que "órganos oficiales del régimen de Sadam planeaban actos terroristas en territorio de EEUU y fuera de sus fronteras, contra objetivos militares y civiles norteamericanos en otros países".
"Esta información se transmitió a los colegas norteamericanos y el presidente Bush dio las gracias personalmente al dirigente de uno de los servicios secretos rusos por esa información, que consideró muy importante", señaló Putin.
La comisión investigadora de los atentados en EEUU concluyó el miércoles que no existen "pruebas creíbles" de vínculos entre Al Qaida y el régimen iraquí, aunque constató que tuvieron contactos.
"Las conclusiones hechas por la comisión no pueden considerarse objetivas, pues no tienen en cuenta otros componentes del problema iraquí y no dan un cuadro completo de la situación en torno a Irak hace dos años", comentó un representante del espionaje ruso.
Agregó que, "al investigar las causas de la crisis iraquí, se deben tener en cuenta todos los aspectos del problema, incluida la amenaza directa que el régimen de Sadam representaba para EEUU".
Pero al ser preguntado Putin si la ocupación de Irak podía considerarse un acto de EEUU en defensa propia, respondió: "No sé. Ese es un tema aparte", y reiteró su rechazo a esa invasión sin el visto bueno del Consejo de Seguridad de la ONU.
"El derecho internacional prevé determinados procedimientos para el empleo de la fuerza en la palestra mundial, y esos procedimientos no se respetaron" en el caso de Irak, manifestó.
Por otro lado, Moscú reanimó el tema de la supuesta existencia de armas de destrucción masiva en Irak, que sirvió de principal pretexto a EEUU para la guerra, y recordó que los expertos internacionales de armas no concluyeron su labor de inspección en el país.
El viceministro de Exteriores ruso, Yuri Fedótov, afirmó que los expertos deben "concluir su trabajo y presentar conclusiones", pues "sólo con su veredicto podrá el Consejo de Seguridad de la ONU cerrar definitivamente el dossier armamentístico iraquí".
"Rusia propone que el Consejo adopte cuanto antes una resolución que revise, teniendo en cuenta las nuevas realidades, el mandato de la comisión de la ONU para la inspección, vigilancia y verificación del desarme de Irak (UNMOVIC) y de la misión del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)", puntualizó.
El objetivo de tal resolución, explicó, es "determinar las nuevas condiciones y marcos jurídicos de la actividad de los inspectores para su eventual retorno a un Irak, donde está en marcha la formación de un Gobierno provisional que representa la soberanía del país".
Además, Rusia intentó quitar hierro a la polémica en el Consejo de Seguridad por la petición de EEUU de prolongar por otro año la inmunidad a sus soldados ante la Corte Penal Internacional, algo que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, consideró que sería "desafortunado" tras los abusos en las prisiones iraquíes.
"No es un asunto sencillo, aunque el Consejo ya lo había aprobado con anterioridad. Nosotros queremos una solución de compromiso, que permita conservar la unidad en el Consejo de Seguridad", dijo Fedótov.
