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9 de Febrero de 2006

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Areopagítica
Bitácora de Alberto Illán Oviedo

Gallardón, el oxígeno que nos falta

Ni Trinidad Jiménez, ni Inés Sabanés, ni el Lenin que los parió a todos. Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid por gracia de Dios y del PP, es el personaje más socialista que se han echado a la cara los madrileños desde las épocas que la media luna dominaban este villorrio de malvivir que terminó convertido en capital de España. Este cruzado de causas perdidas ha decidido que joder a los madrileños a base de zanjas, curvas y contracurvas de peligro más que evidente y mareo más que asegurado, no es suficiente (me refiero a las obras de la M-30, autopista de circunvalación de Madrid). Así que, convencido que puede disminuir las emisiones contaminantes que terminan en el aire madrileño en un 13% (no un 15% o un 10%, un 13%) ha decidido que todos los madrileños dueños de un coche semi-nuevo van a tener que hacer un desembolso, porque a él le sale del forro del coche oficial, que seguramente es de vaca sacrificada como marca la ley.

Albertito, mi tocayo, va a prohibir en 2010 circular por el centro de la ciudad a los vehículos de más de seis años, es decir todos los comprados en 2004 o antes. Pero como el deseo de este abanderado de Greenpeace es joder a la gente antes de esta lejana fecha, en 2008 no podrán desplazarse por esa misma zona los vehículos con 13 años de antigüedad. Vamos, que si me dicen que esto es una conspiración del lobby de fabricantes de coches con el alcalde-zanja de Madrid, pues que me lo creo.

Parece que Albertito quiere adaptar la ciudad a las normas europeas de emisiones contaminantes. Así que supongo que en algún momento entre el desayuno a base de porras y churros y la cena a base de callos a la madrileña con garbanzos y butifarra habrá tenido tan brillante idea, digna de figurar en ese hortera libro de récords, aunque no sé en qué categoría. Pues por mi que se pude meter las normas europeas donde le quepan, lo mejor en una zanja y luego las entierra.

Vamos a ver Albertito, de dónde va sacar la gente 12.000 euros o 15.000 ó 40.000, para cambiar de coche. Habrá gente que los tenga y habrá gente que no. Habrá muchos inmigrantes que llegan aquí, compran coches de segunda mano que son los que pueden adquirir y que tu pones fuera de la puta almendra central que a lo mejor es donde trabajan y que necesitan ese automóvil para trabajar ahí. Porque tú con tu coche oficial te llevan a todas partes y no te das cuenta de nada. A lo mejor, hay gente que puede comprarse el coche pero no le apetece porque esta hasta el gorro de que tú y políticos como tú les digan lo que tienen que hacer o lo que tienen que comer o lo que tienen que conducir. A lo mejor Albertito, hay mucho personaje que pasa de ti en las próximas elecciones y es capaz de votar antes as las Panteras Negras o a las Amazonas Rubias y Pechugonas si es que se presentan a la alcaldía. Verás, Albertito, por qué no solucionas lo de la contaminación simplemente realizando muchas menos obras que no hacen más que soltar partículas de todo tipo al aire y buscas otras maneras menos liberticidas. Ya puestos, porque no te inspiras en los suizos, que también saben apuntarse a la moda fascio-ecologista.

Verás Albertito, porque no te vas ya de una vez y dejas el puesto a otro, que seguramente en tu partido hay gente un poco menos socialista que tú. Sólo un poco, pero de verdad que se nota mucho.

Firmado, un convaleciente de gripe muy cabreado

Comentarios

 
Pues párate, no se le vaya a ocurrir a este "genio" poner un medidor de la respiración a cada persona, para impedir la circulación por el centro de Madrid de todos aquellos ciudadanos que consuman mucho oxígeno.
Enviado por el día 9 de Febrero de 2006 a las 23:24 (1)
El problema no es la contaminación. Nadie que conozca las labores de Gobierno de Alberto Ruiz Gallardón puede encontrar el ecologismo entre sus mínimas previsiones.

El problema es el siguiente: ante la inyección de capital que hubiere traido Madrid 2012, el Ayuntamiento de Madrid se ha puesto a hacer obras en las carreteras, en el Metro, en los autobuses, etc... y ahora está hasta el cuello de deudas.

Lección básica de los servicios públicos: ¿cómo podemos asegurar la viabilidad de los servicios públicos? Obligando a la gente a tener que consumirlos. El objetivo de tal medida es volcar gran parte del tráfico en el Metro o el Autobús para así poder amortizar inversiones.

El edil hace poco estaba alegre porque la M-30 caía fuera de los inspectores meidoambientales de Bruselas. Ese es todo el aprecio que le tiene a las directivas Europeas.
Enviado por el día 10 de Febrero de 2006 a las 11:37 (2)

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