15 de Enero de 2006
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Bitácora de Alberto Illán Oviedo
El Eje francoalemán contra Google
Leyendo El País he caído en un interesantísimo artículo sobre el desarrollo de "Quaero", el futuro motor de búsqueda en Internet europeo que pretende competir con el mismísimo Google y arrinconarle. Hasta aquí nada que objetar, un nuevo producto en el mundo de Internet debería ser una estupenda noticia si no fuera porque este proyecto no tiene como génesis a dos jovencitos europeos en una clase de ingeniería en cualquier universidad del Viejo Continente sino a dos pesos pesados de la política europea, hijos merecidos del Eje Francoalemán y que no son otros que Jacques Chirac y Gerhard Schröder, cuya ansia de intervención no conoce fin y que en abril de 2005 promovieron esta idea.
Google, como ya ha ocurrido con Microsoft, se ha convertido en una bestia negra para las autoridades europeas. El hecho de que no puedan controlarlo es algo inconcebible en esta Europa intervencionista que estamos creando día a día. El poder de Google (que aparece en el título del artículo) es el poder del esfuerzo y de las ideas, es el poder de la actividad empresarial, es el poder de los individuos. El poder de Quaero, si es que se termina concretando en algo, es el poder de la intervención, es el poder de la envidia, es el poder del antiamericanismo del que hace gala este eje francoalemán, es el poder del Estado en su estado más puro. Este Quaero, nombre que querrá decir en latín ""yo busco" pero creo que muy desafortunado desde el punto de vista comercial, lleva ya varios meses de retraso, lo que le da ese toque estatal que tanto sufrimos los ciudadanos. France Telecom y Deutsche Telekom, las operadoras francesa y alemana, ambas con participación mayoritaria de los dos Estados, si no me equivoco, colaboran el proyecto junto a Thomson, el Instituto Nacional francés de Investigación Informática y Automática, y la Universidad de Karlsruhe.
Resulta interesante la justificación que nos da Alfonso Díez, profesor de Ciencias de la Información de la Complutense madrileña:
"La clave para evaluar el peso estratégico de Google es entender que, en definitiva, se trata de un medio de comunicación, de una entidad que ofrece información a los usuarios. Que prioriza según sus criterios la información disponible en la Red"
Para seguir con:
"Yo entiendo que hasta ahora sus criterios de búsqueda han sido bastante equilibrados. Pero está claro que nadie garantiza que eso sea siempre así. Y está claro que, considerando el número de usuarios [380 millones al mes], el poder de poner contenidos al número uno y dos o al número 257 es un poder bastante terrible [...] por eso, yo creo que Quaero es un proyecto oportuno [...] algo que puede beneficiar a quienes invierten en él, pero también el propio Google. Un competidor válido y riguroso le empujaría a mantener el equilibrio. Si fuera posible, yo configuraría Quaero como un servicio público, con un papel parecido al que desempeñan las cadenas televisivas públicas"
Bien el asunto sí que es terrible. El hecho de que Google sea sectario se soluciona con que el usuario de este motor, lo dé de lado y se dedique a buscar con otro. Si en el mercado hubiera suficientes, objetivos, subjetivos, políticamente incorrectos, políticamente correctos, guarretes, ordinarios, tecnológicos, lentos, rápidos, etc entonces no habría ningún problema. Cada uno encontraría el que más le gustara y se acabaría la controversia.
Pero lo que nos dice el profesor Diez es que Google no es fiable, aunque hasta ahora lo ha sido, por su condición de buscador privado y que la solución de hacer uno público zanjaría el tema. Si quieres información objetiva y justa, Quaero, si la quieres desequilibrada y sesgada, Google. Y se queda tan pancho.
Siempre me ha sorprendido la ingenuidad de los socialistas, no de los políticos socialistas, sino de los ciudadanos socialistas. Una persona en tanto miembro o dueño de una empresa privada es un ser egoísta que busca engañar al ciudadano. Pero ese mismo personaje, en el sector público es un angelito que sólo busca el bien de los demás. Chirac y Schröder no fueron precisamente el colmo de la honradez, cada uno por su parte han sido, son dos pájaros de cuidado. El buscador Quaero, en tanto sea público, estará influenciado por lo público, por la visión políticamente correcta que impere en el momento. El usuario verá que encuentra lo que los poderes públicos quieran y eso no es equilibrio, es manipulación. Y si me atrevo a hacer esta predicción es porque las televisiones públicas funcionan así desde hace décadas y con el dinero de todos.
Si se quiere competir con Google, dejemos que los empresarios desarrollen cosas como Google, con su potencia, con sus capacidades, con sus sesgos a derecha e izquierda, hacia arriba o hacia abajo, y si puede ser mejores y ya veremos cuál es el que prefieren los ciudadanos. Pero con el dinero de los europeos no, que para eso ya tenemos muchos canales públicos de manipulación.
Google, como ya ha ocurrido con Microsoft, se ha convertido en una bestia negra para las autoridades europeas. El hecho de que no puedan controlarlo es algo inconcebible en esta Europa intervencionista que estamos creando día a día. El poder de Google (que aparece en el título del artículo) es el poder del esfuerzo y de las ideas, es el poder de la actividad empresarial, es el poder de los individuos. El poder de Quaero, si es que se termina concretando en algo, es el poder de la intervención, es el poder de la envidia, es el poder del antiamericanismo del que hace gala este eje francoalemán, es el poder del Estado en su estado más puro. Este Quaero, nombre que querrá decir en latín ""yo busco" pero creo que muy desafortunado desde el punto de vista comercial, lleva ya varios meses de retraso, lo que le da ese toque estatal que tanto sufrimos los ciudadanos. France Telecom y Deutsche Telekom, las operadoras francesa y alemana, ambas con participación mayoritaria de los dos Estados, si no me equivoco, colaboran el proyecto junto a Thomson, el Instituto Nacional francés de Investigación Informática y Automática, y la Universidad de Karlsruhe.
Resulta interesante la justificación que nos da Alfonso Díez, profesor de Ciencias de la Información de la Complutense madrileña:
"La clave para evaluar el peso estratégico de Google es entender que, en definitiva, se trata de un medio de comunicación, de una entidad que ofrece información a los usuarios. Que prioriza según sus criterios la información disponible en la Red"
Para seguir con:
"Yo entiendo que hasta ahora sus criterios de búsqueda han sido bastante equilibrados. Pero está claro que nadie garantiza que eso sea siempre así. Y está claro que, considerando el número de usuarios [380 millones al mes], el poder de poner contenidos al número uno y dos o al número 257 es un poder bastante terrible [...] por eso, yo creo que Quaero es un proyecto oportuno [...] algo que puede beneficiar a quienes invierten en él, pero también el propio Google. Un competidor válido y riguroso le empujaría a mantener el equilibrio. Si fuera posible, yo configuraría Quaero como un servicio público, con un papel parecido al que desempeñan las cadenas televisivas públicas"
Bien el asunto sí que es terrible. El hecho de que Google sea sectario se soluciona con que el usuario de este motor, lo dé de lado y se dedique a buscar con otro. Si en el mercado hubiera suficientes, objetivos, subjetivos, políticamente incorrectos, políticamente correctos, guarretes, ordinarios, tecnológicos, lentos, rápidos, etc entonces no habría ningún problema. Cada uno encontraría el que más le gustara y se acabaría la controversia.
Pero lo que nos dice el profesor Diez es que Google no es fiable, aunque hasta ahora lo ha sido, por su condición de buscador privado y que la solución de hacer uno público zanjaría el tema. Si quieres información objetiva y justa, Quaero, si la quieres desequilibrada y sesgada, Google. Y se queda tan pancho.
Siempre me ha sorprendido la ingenuidad de los socialistas, no de los políticos socialistas, sino de los ciudadanos socialistas. Una persona en tanto miembro o dueño de una empresa privada es un ser egoísta que busca engañar al ciudadano. Pero ese mismo personaje, en el sector público es un angelito que sólo busca el bien de los demás. Chirac y Schröder no fueron precisamente el colmo de la honradez, cada uno por su parte han sido, son dos pájaros de cuidado. El buscador Quaero, en tanto sea público, estará influenciado por lo público, por la visión políticamente correcta que impere en el momento. El usuario verá que encuentra lo que los poderes públicos quieran y eso no es equilibrio, es manipulación. Y si me atrevo a hacer esta predicción es porque las televisiones públicas funcionan así desde hace décadas y con el dinero de todos.
Si se quiere competir con Google, dejemos que los empresarios desarrollen cosas como Google, con su potencia, con sus capacidades, con sus sesgos a derecha e izquierda, hacia arriba o hacia abajo, y si puede ser mejores y ya veremos cuál es el que prefieren los ciudadanos. Pero con el dinero de los europeos no, que para eso ya tenemos muchos canales públicos de manipulación.
Comentarios
Y si fuera cierto lo que dice Robert X. Cringely en este artículo, ¿qué harán esos dos pardillos? ¿Darnos también la conexión a internet gratis?
jajaja
existen decenas de miles de buscadores, a estos burócratas el árbol les impide ver el bosque.
El año pasado Bill Gates invirtió millones para mejorar el msn search y a pesar de eso no logró asomarse más allá del 10% del total de las busquedas, lo que muestra que el dinero solo por abundante que sea no cambia la decisión de las personas.
El buscador Qaero va a ser un derroche total de dinero publico y no va a lograr nada, no lo pudo hacer bill gates menos lo van a poder hacer estos burócratas que no tienen ni idea de computación.
¿¿Es necesario utilizar dinero público proveniente de los impuestos para hacer estas huevadas?? Con cosas como estas siguen destruyendo el poco sustento que tiene este robo llamado impuestos.
existen decenas de miles de buscadores, a estos burócratas el árbol les impide ver el bosque.
El año pasado Bill Gates invirtió millones para mejorar el msn search y a pesar de eso no logró asomarse más allá del 10% del total de las busquedas, lo que muestra que el dinero solo por abundante que sea no cambia la decisión de las personas.
El buscador Qaero va a ser un derroche total de dinero publico y no va a lograr nada, no lo pudo hacer bill gates menos lo van a poder hacer estos burócratas que no tienen ni idea de computación.
¿¿Es necesario utilizar dinero público proveniente de los impuestos para hacer estas huevadas?? Con cosas como estas siguen destruyendo el poco sustento que tiene este robo llamado impuestos.
Se me ha adelantado moebius, pero me gustaría que desarrollaras el tema de la imposibilidad de obligar a que la gente use lo que no quiere. Si sin más ponen en marcha ese buscador, dinero tirado ¿para qué voy a usarlo si manipulan? Puede que no manipulen, después de todo, entonces lo usaríamos, tal vez hasta hacerle la competencia a Google. En este último caso puede que cuando tengan un buen porcentaje se pongan a manipular, pero con la vigilancia que le da la gente a estas cosas (más cuanto más éxito, el mismo Google está muy vigilado) en dos días, adiós.
No sé, creo que o añaden medidas coactivas adicionales o es una "simple" pérdida de dinero del contribuyente. O sea, ¿qué opinas de esas posibles medidas?
No sé, creo que o añaden medidas coactivas adicionales o es una "simple" pérdida de dinero del contribuyente. O sea, ¿qué opinas de esas posibles medidas?
Y que hará Chirac cuando deje la presidencia? Convertirse en empleado de lujo de la empresa resultante como ha hecho Schroder con la empresa de conexión de gas que impulso siendo Canciller? Este ha sido para mí uno de los mayores escándalos de la politíca europea de los últimos años demostrando que Alemania ( e indirectamente Europa ) estaba en manos de un oportunista y nadie le ha dado la mayor importancia. Observese el distinto tratamiento que la prensa europea ha dado al caso comparando: Cheney-Halliburton, Gas-Schroder.
Los europeos somos así y no escarmentamos, nos paso con el modelo osi, nos ha pasado con los servidores centrales de Internet y nos va a pasar con esto. Que levante la mano quien no se haya dado cuenta que al mercado no lo puedes condicionar. A ver si Chirac ve el anuncio de "aquarius"
Que curioso! Dos países tienen que juntarse y formar una compañía para competir contra otra fundada por dos tipos universitarios. Por qué no pueden dos europeos hacer lo mismo y ser tan prósperos como estos dos "gringos"?
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