4 de Diciembre de 2006
« Pues en contra. De la Educación para la Ciudadanía, digo. | Principal | ¡Al carajo con el Estado de Bienestar! »
Bitácora de José Carlos Rodríguez
Zapatero nos quiere dar lecciones de moral
Lo anterior me recuerda que no he traído aún mi penúltimo artículo en LD, Zapatero nos quiere dar lecciones de moral:
¿Compraría a Zapatero un coche usado? Piense en los que siente más cercanos. ¿Se lo comprarían ellos? A que no le resulta fácil encontrar a alguien que verdaderamente pusiera su dinero confiando en la palabra de Zapatero como garantía de un vehículo de segunda mano.El asunto me tiene verdaderamente preocupado, y la muestra es que es el segundo artículo que le dedico. El primero fue Formación del Espíritu Progresista:
Pues ahora hágase la siguiente pregunta: ¿confiaría a Zapatero la educación moral de su hijo? El simple planteamiento produce escalofríos. Pero eso es exactamente lo que va a ocurrir para millones de familias españolas, gracias a la Formación del Espíritu Progresista, también llamada Educación Para la Progresía.
Lo explica Sowell. Los socialistas tienen una visión maleable del ser humano, ven a la persona como una pieza de plastilina y se excitan con ensoñaciones de futuras sociedades compuestas con nuevos ciudadanos moldeados a su imagen y semejanza. Personas que han descartado las tradiciones, la cultura caduca en la que aún vivimos y han adquirido hasta los tuétanos los ideales de la nueva sociedad. Es la construcción del "nuevo hombre socialista" que se intentó el pasado siglo, llevándose de por medio, nada, a decenas de millones de seres humanos. Los socialistas de todo pelaje guardan todavía esta ensoñación totalitaria, que en España ha tomado la forma de una nueva Ley de Educación: la LOE. El texto habla literalmente de "construcción de ciudadanos", siempre desde los valores de la izquierda.El asunto es escalofriante. Por eso abogo por la libertad de enseñanza.
Comentarios
"ven a la persona como una pieza de plastilina y se excitan con ensoñaciones de futuras sociedades compuestas con nuevos ciudadanos moldeados a su imagen y semejanza."
Lo de las ensoñaciones es cierto y daría para un estudio de psicopatología. Con muchos de esos ingenieros de almas es llamativo lo que se parecen sus cogitaciones a fantasías de novela de serie B.
Lo de las ensoñaciones es cierto y daría para un estudio de psicopatología. Con muchos de esos ingenieros de almas es llamativo lo que se parecen sus cogitaciones a fantasías de novela de serie B.
Si, Dlluis, para un estudio de psicopatología, en plan fino o de la profundización de esos conceptos más mundanos que son la envidia y el rencor.
Esos dos pecados tienen como “virtud” el que distorsionan la percepción de la realidad otorgando al otro las causas de lo que a uno le pase. Uno no tiene lo que otro tiene porque lo tiene el otro, no que el puede conseguirlo igualmente si se esfuerza. Uno siente rencor hacia otro si no obtiene resultados porque ese otro puede tener o haber tenido ayudas o mejores condiciones que él, nunca porque en esa diferencia que a todos nos caracteriza da lugar a diferentes resultados. De ahí que el igualitarismo sea uno de sus tótems. El mito de la igualdad para tratar ilusoriamente de eliminar la diferencia de resultados.
Bueno. Esto que digo supongo que no gustará a muchos, pero siguiendo las palabras de Freud lo que hay que hacer es “conocerse a uno mismo”, entenderse, saber cuales son mis metas y mis posibilidades y esforzase por obtener aquello que uno estima como lo mejor para sí, y no el justificar los fracasos por los méritos de los demás.
Psicología de patio, pero análisis al fin y al cabo.
Esos dos pecados tienen como “virtud” el que distorsionan la percepción de la realidad otorgando al otro las causas de lo que a uno le pase. Uno no tiene lo que otro tiene porque lo tiene el otro, no que el puede conseguirlo igualmente si se esfuerza. Uno siente rencor hacia otro si no obtiene resultados porque ese otro puede tener o haber tenido ayudas o mejores condiciones que él, nunca porque en esa diferencia que a todos nos caracteriza da lugar a diferentes resultados. De ahí que el igualitarismo sea uno de sus tótems. El mito de la igualdad para tratar ilusoriamente de eliminar la diferencia de resultados.
Bueno. Esto que digo supongo que no gustará a muchos, pero siguiendo las palabras de Freud lo que hay que hacer es “conocerse a uno mismo”, entenderse, saber cuales son mis metas y mis posibilidades y esforzase por obtener aquello que uno estima como lo mejor para sí, y no el justificar los fracasos por los méritos de los demás.
Psicología de patio, pero análisis al fin y al cabo.
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