8 de Junio de 2004

Definitivamente, para el nuevo Gobierno socialista y para el ministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos en especial, los españoles están compuestos en su mayoría por subnormales profundos, ignorantes acomodados, incultos con pedigrí, manifestantes ofuscados y memos integrales. Los españoles somos idiotas de principio a fin, empezando por los pelos de la coronilla y terminando en la punta del pie. Porque sólo minusvalorando así la inteligencia de la gente se puede uno tragar que la decisión del gobierno español de retirar, cobardemente añado yo, nuestras tropas de Irak ha provocado nada más ni nada menos que Estados Unidos se haya reconciliado con Francia y Alemania y hayan impulsado la firma (si es que se firma) de una nueva resolución sobre Irak en la ONU. Y algunas veces me asalta la duda de si efectivamente Moratinos y sus colegas de gobierno tienen razón. Que el conocimiento de geoestrategia y política internacional en la sociedad española es nulo, cuando no negativo y lo peor es que de ello se aprovechan.

En fin, volviendo al amigo Curro, hay que decir que le ha echado un par. Pa' chulo yo habrá pensado. A estas alturas no se si algún diplomático ha conseguido recuperarse de los ataques de risa internacionales que semejante declaración ha provocado entre el personal. Creo que hasta el carnicero de Bagdad ha derramado una lagrimita cuando se lo ha dicho su carcelero. Osama estará estupefacto, no esperaba semejante declaración. Duda si perpetra otro atentado o le ficha para su causa metiéndole de topo en la CIA.

Esto es como si asignamos el descubrimiento de la Penicilina al limpiador que se dejó abiertas las ventanas y que permitió que las esporas de un cultivo de penicillium de uno de los pisos se colocaran por las ventanas de otra planta donde reposaban las placas petri repletas de colonias de bacterias, para alegría de Alexander Flemming.