29 de Diciembre de 2005
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Bitácora de José Carlos Rodríguez
Esos molestos barcos de vapor...
Division of Labour ha rescatado un artículo de hace cien años (y un día). Se refiere al tráfico de barcos de vapor en Nueva York. Era muy intenso, como corresponde a una gran ciudad portuaria con un enorme volumen de tráfico de personas y mercancías. Tan es así, se decía, que estaba causando auténticos problemas de salud por el enorme ruido que provocaban los habituales pitidos de las embarcaciones. Lo explicaba de este modo el artículo del New York Times de 28 de diciembre de 1905:
1) Que las llamadas apocalípticas sobre las nuevas tecnologías y su uso comercial no son en absoluto nuevas.
2) Que deberíamos darnos cuenta de que un problema real causado por el uso de una tecnología no tiene porqué ser eterno. Hoy los barcos no necesitan emitir fuertes pitidos para alertar de su posición o avisar de su llegada. Y no es así no a pesar de la evolución tecnológica, sino por causa de ella. Las tecnologías cambian. Y los efectos perniciosos que se puedan derivar de su uso se paliarán con mayor inversión en tecnología, no con la renuncia a ella. Y para esa inversión necesitamos ser más ricos. La riqueza es el camino a la solución de los problemas medioambientales.
3) A los periódicos les encanta meter el miedo en el cuerpo de sus lectores, seguramente porque a los lectores nos gustan las emociones fuertes.
4) Dentro de 100 años alguien escribirá una anotación sobre alguna información de hoy referida a la polución de los coches, y sus lectores tendrán la misma impresión que tenemos hoy sobre los pitidos de los barcos a vapor.
Desde el punto de vista de la salud, el Doctor John H. Girdner, que ha hecho un estudio especial sobre los efectos de los ruidos sobre el cerebro y sobre la condición general de la anatomía humana, ha testificado que él cree que frecuentemente se han producido muertes como consecuencia del terrorífico desgaste del cerebro y los nervios producido por los ruidos. 'Creo', dijo, 'que muchos de los que murieron el 5 de julio fueron llevados a la tumba por los ruidos del 4 de julio. La diferencia entre el ruido y la música es una diferencia de ritmo. El constante galope de un caballo no es dañino'.Me da que este protoecologista era un pelín exagerado. Lo que me llama la atención de lo extractado por Craig Depken en esta anotación es
1) Que las llamadas apocalípticas sobre las nuevas tecnologías y su uso comercial no son en absoluto nuevas.
2) Que deberíamos darnos cuenta de que un problema real causado por el uso de una tecnología no tiene porqué ser eterno. Hoy los barcos no necesitan emitir fuertes pitidos para alertar de su posición o avisar de su llegada. Y no es así no a pesar de la evolución tecnológica, sino por causa de ella. Las tecnologías cambian. Y los efectos perniciosos que se puedan derivar de su uso se paliarán con mayor inversión en tecnología, no con la renuncia a ella. Y para esa inversión necesitamos ser más ricos. La riqueza es el camino a la solución de los problemas medioambientales.
3) A los periódicos les encanta meter el miedo en el cuerpo de sus lectores, seguramente porque a los lectores nos gustan las emociones fuertes.
4) Dentro de 100 años alguien escribirá una anotación sobre alguna información de hoy referida a la polución de los coches, y sus lectores tendrán la misma impresión que tenemos hoy sobre los pitidos de los barcos a vapor.
Comentarios
Meeeec. Nadie escribirá ninguna anotación dentro de 100 años. No sabemos qué se empleará entonces para comunicarse con los demás.
Ya, ya, no creas que no lo he pensado. Pero creo que habrá algo parecido. Al fin y al cabo un blog es una forma privada de lanzar mensajes a un espacio público. Quizás recuerden este internet como algo muy rudimentario, pero habrá comunicaciones interpersonales como ésta con otro soporte más eficaz.
Me vienen a la memoria esos pequeños "nodos" que se emitían a mitades delos cincuenta, principalmente en los EEUU, en los que, a propósitode la presentación de ciertos prototipos, se hacían cábalas sobre cómo iba a ser la cocina, el coche, la lavadora, la vestimenta del año 2000. Despues ha resultado que aquello, más que ciencia ficción, era un delirante cachondeo. Dentro de cien años pueden ocurrir muchas cosas, ninguna de ellas aventurable, porque es imposible hacer extrapolación casi en ningún campo, y menos en eel de la evolución tecnológica. A mí me parece encantador el holograma ese en el que sale R2D2, pero es una preferencia personal.
Iorov: Las conclusiones que vienen de un razonamiento inductivo son la 3 y la 4... Que a los periódicos les gusta asustar, y que dentro de 100 años volverán a sorprenderse de lo que nos preocupamos ahora.
Pero es que tienes una facilidad enorme para fijarte en lo irrelevante. Que la prensa le gusta asustar, no creo que Amagi lo exponga símplemente a partir de esta noticia... Es más, creo que es algo comúnmente aceptado, pues la prensa vive del impacto. En cuanto a que dentro de 100 años pasará lo que predice Amagi... pues seguro. Eso sí, le ha faltado poner ese punto de incertidumbre.
En cuanto a lo demás, que es lo realmente sustancioso (las conclusiones 1 y 2), supongo que coincidirás conmigo en que no son en absoluto fruto de un razonamiento inductivo...
Creo que el razonamiento inductivo fundamental es el que te has creado tú mismo al leer la noticia... ¿no crees?
Pero es que tienes una facilidad enorme para fijarte en lo irrelevante. Que la prensa le gusta asustar, no creo que Amagi lo exponga símplemente a partir de esta noticia... Es más, creo que es algo comúnmente aceptado, pues la prensa vive del impacto. En cuanto a que dentro de 100 años pasará lo que predice Amagi... pues seguro. Eso sí, le ha faltado poner ese punto de incertidumbre.
En cuanto a lo demás, que es lo realmente sustancioso (las conclusiones 1 y 2), supongo que coincidirás conmigo en que no son en absoluto fruto de un razonamiento inductivo...
Creo que el razonamiento inductivo fundamental es el que te has creado tú mismo al leer la noticia... ¿no crees?
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