27 de Diciembre de 2006
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Bitácora de Juan Fernando Carpio
El patrón oro contra la Gran Depresión
Leyendo a Mark Skousen en "Vienna & Chicago: Friends or Foes?" me encuentro con que los pensadores del monetarismo de Chicago se oponen sólo tangencialmente al patrón oro (pues quieren poder fijar una regla monetaria), dado que la producción del oro, incluso en el famoso Gold Rush californiano, no incrementó la oferta global de oro nunca en más de un 5%. El promedio fluctuó de hecho entre 1 y 5%, casualmente dentro de los parámetros de Friedman para su monetary rule.
"Si el patrón oro hubiera seguido predominando, los influjos de oro que tuvieron lugar, más aún antes de 1929 y durante los 4 años críticos que le siguieron, hubiesen incrementado la oferta dinero en la cantidad "correcta". No hubiese existido una recesión-devenida-depresión" - Richard Timberlake, en "Monetary Policy in the United States, An Intellectual and Institutional History", University of Chicago Press, 2003.
"Un patrón oro integral en que todo el dinero consistiese de oro o recibos de almacenaje del mismo, exceptuando quizás una emisión fiduciaria prefijada hubiese tenido los grandes méritos de ser automático y de ser libre del control gubernamental" - Milton Friedman, 1960
Los flujos de dinero por comercio, inversiones y balanza de pagos internacional, sirven para compensar también cualquier desequilibrio temporal.
En suma, si la Fed no generaba -en ausencia ya de un patrón oro judicialmente garantizado- el riesgo moral necesario para la expansión crediticia de los 1920's, y la Gran Depresión que llevó a la preeminencia keynesiana y al refuerzo de las sospechas sobre las "contradicciones inherentes" del Capitalismo en los marxistas, no hubiera sido tal.
Cuántos dolores nos hubiesemos ahorrado como humanidad sin el neomercantilismo rampante de los keynesianos y la tozudez triunfalista de los socialistas en base a ese evento histórico...
Comentarios
Ufff.... la veces que lo dije y nadie me dió bola....pero bueno,ahora estás tú que eres más inteligente y puedes hacer mucho ruido con este tema, hay un gran desconocimiento sobre el patrón oro,es muy sintomático que este tema esté fuera de los debates y tertulias,desinformación marxiana que le dicen...y los keynesianos compran...jjajajaja
Saludos Liberales,
Saludos Liberales,
Durante una velada de estas Navidades de reencuentros con viejos amigos, tuve la ocasión de plantear como tema de debate la cuestión del patrón oro. Todos mis contertulios tomaron mi defensa del mismo como una extravagancia y pude notar como se apoyaban en las ideas keynesianas y estatistas que han formado parte del bagaje cultural medio de un individuo occidental durante más de cincuenta años.
Sin embargo creo que conseguí suscitar sus dudas sobre la supuesta bondad del dinero fiduciario, y, al mismo tiempo, alertarles del proceso inflacionario que generan los gobiernos (o actualmente en la Unión Monetaria Europea el Banco Central Europeo) con un instrumento tan sencillo para el engaño como éste.
Sin embargo creo que conseguí suscitar sus dudas sobre la supuesta bondad del dinero fiduciario, y, al mismo tiempo, alertarles del proceso inflacionario que generan los gobiernos (o actualmente en la Unión Monetaria Europea el Banco Central Europeo) con un instrumento tan sencillo para el engaño como éste.
El patrón oro es un mecanismo claramente irracional en el sentido de que al dejar el volumen de denero en poder de las sociedades al albur de lo que ocurra en el futuro con los nuevos yacimientos de ese metal impone unas limitaciones artificiales a una herramienta tan fundamental para la civilización humana como la política monetaria.
Dicho esto, me declaro, sin embargo, un firme defensor del patrón oro. Y es que vista la ilimitada irresponsabilidad de las autoridades económicas y monetarias y su asombrosa tendencia a la inundación de liquidez como remedio a los problemas generados por su propia incompetencia, he llegado a la conclusión de que incluso un límite "ciego" como el patrón oro es mucho mejor que el sistema actual.
Dicho esto, me declaro, sin embargo, un firme defensor del patrón oro. Y es que vista la ilimitada irresponsabilidad de las autoridades económicas y monetarias y su asombrosa tendencia a la inundación de liquidez como remedio a los problemas generados por su propia incompetencia, he llegado a la conclusión de que incluso un límite "ciego" como el patrón oro es mucho mejor que el sistema actual.
Revisar la Historia es un juego peligroso. Podemos afirmar, siguiendo el mito, que maldita la hora en que Eva comió la manzana. ¿Y?
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