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22 de Febrero de 2006

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Todo un hombre de Estado
Bitácora de Juan Ramón Rallo Julián

Estragos de la educación pública


Por lo visto la educación pública, ese mecanismo totalizador de cambio y transformación social, despierta pasiones entre sus seguidores, no vaya a ser que se les estropee el juguete a través del cual imprimen las mentiras socialistas en la mente de las personas desde la más tierna infancia.

Esta vez el escudero ha sido Pijus Economicus, de la factoria de calamidades de la oferta crea su propia demanda. El propio autor reconoce que para que su sistema funcione correctamente necesitan del control de la educación.

Hay gente que escribe verdades que no llega ni a entender. Esto le acaba de pasar a Pijus, todo el resto del post queda inmediatamente refutado por esta frase. El problema es el CONTROL de la educación o lo que es lo mismo, la centralización del poder y de la verdad en un único punto de control.

Continúa Pijus diciendo que: La educación pública puede y debe ser plural, cosa que hoy no sucede en favor del liberalismo. Nadie puede elegir más allá de las posibilidades que se le ofrezcan, y mientras el dogmatismo concede una única visión (pensamiento único), la democracia debe ofertar gratuitamente más.

¿La educación pública puede ser plural? ¿En qué sentido cabe pluralidad acerca de los medios coactivos empleados? Estamos hablando de que una persona roba al resto de individuos para implementar un sistema de adoctrinamiento compulsivo con una férrea supervisión del programa de enseñanza. ¿Qué tipo de pluralidad cabe dentro de la servidumbre? ¿La pluralidad que acotan los medios policiales? La pluralidad es un objetivo ideológico sin sustancia, relativista, y carente de cualquier significado. La pluralidad depende de la impresión subjetiva del individuo, no de condiciones objetivas ajenas a su juicio y comprensión.

El político es incapaz de alcanzar la pluralidad porque sus métodos consisten en imponerla y, por tanto, en eliminar todo lo que no encaje en su visión deformada de la misma. No puede lograr ningún tipo de diversidad, porque entonces quedaría supeditado a las valoraciones de las personas; el político no obedece, reprime y coacciona. La concepción inmaculada del Estado, de los medios políticos y de los instrumentos propagandísticos de la educación sólo sirve para realimentar el bucle de las milongas opresoras. El Estado cultiva (sí, eso es un KinderGARTEN) a sus propios defensores, a los burócratas de mañana. Es una ficción descarada que sólo pretende medrar a costa de los demás. La pluralidad queda fuera de sus esquemas; de hecho, la única pluralidad que permite es la pluralidad aparente que apacigue las aguas revolucionarias. El espejismo de la diversidad dentro del mando militar, el espejismo de la autonomía, de la libertad condicionada al poder revocatorio supremo.

No, no mintáis más. La educación pública no tiene nada de veraz ni de plural; no forma, sino deforma; no desarrolla, sino que atrofia. Como intelectuales orgánicos, como voceros del régimen, como estandartes del engaño, tenéis una responsabilidad primaria en el soporte ideológico y moral de la explotación y del adoctrinamiento masivo. Sois fruto de la mentira e impulsores de su perpetuación.

El mercado no restringe ninguna posibilidad; NO existen posibilidades al margen de las que crea la acción. Lo que los sicofantes del régimen defendéis es el expolio de las oportunidades que otros han creado y su reparto carroñero. Los buitres del poder político rapiñan la riqueza para mantener intacto su arsenal de represión: la educación socialista sólo sirve para hacerles comprender por qué son y deben seguir siendo esclavos.

Sigue Pijus con otro pasaje muy gracioso: De hecho, cuando es el mercado el que regula la educación (contra esta regulación no estamos en contra, ¿no?), aquellas asignaturas, materias, carreras o estudios de cualquier tipo que no tienen respuesta económica en el mercado, quedan en el olvido.

Primero, ¿qué es esto de que el mercado regula la educación? Cuando no hay un centro rector, una cabeza consciente que controla todas y cada una de las acciones de los individuos, ¿de qué regulación hablamos? ¿No estaremos pensando en el orden espontáneo surgido de las acciones voluntarias de cada una de las personas? Entonces, ¿por qué oponernos a aquellas acciones libres que no perjudican a nadie?

Segundo, el mercado no obliga a que ninguna asignatura caiga en el olvido. Más bien al contrario, la libertad consiste en elegir entre varias opciones, entre ellas las de renunciar a unos tipos de conocimiento en favor de otros. Unos tipos de información son monetariamente recompensados, otros no; pero ello no significa que el individuo tenga que decantarse por los primeros. No todos los seres humanos se dirigen hacia los salarios más altos; otros elementos como el tipo de trabajo, la distancia, el ambiente o las amistades entran en su juicio. De la misma manera, una persona puede dedicir acaparar conocimiento que no resulta útil para otras personas aun cuando ello suponga renunciar a un mayor flujo monetario. La decisión la toma cada individuo; la cuestión es qué hacemos cuando ciertas áreas del conocimiento no interesan a nadie. ¿Las imponemos coactivamente? Si no son útiles ni para la sociedad ni para el individuo, ¿qué sentido tiene que el estudio de esa información restrinja el tiempo de estudio de otra información que sí es útil? Y el problema de estos ungidos sigue siendo el mismo, ¿cómo valorar la utilidad de un tipo de conocimiento al margen de la decisión individual y de la prospección de su precio de mercado?

Por supuesto, Pijus prosigue con su visión estrechísima de la ciencia económica y de la cooperación social: Así la carrera de Antropología, Humanidades, las visiones heterodoxas del pensamiento único imperante, la historia en su acepción total o cualquier estudio que no sirve a ninguna empresa, están con la soga al cuello, porque al mercado del beneficio le ha dado la real gana de convertirnos en simples consumidores.

¿Acaso la Escuela Austriaca de Economía ha sido el paradigma imperante en universidades y empresas durante más de 150 años como para que no desaparezca? Y en ese caso, ¿cómo explica la primitiva modelización de un homo pijeconomicus el auge actual? ¿Acaso no será que cientos de individuos han sido suficientemente coherentes como para no someterse a los corruptos paradigmas neoclásico y marxista, manteniendo viva toda una tradición de conocimiento económico científico? ¿Acaso Pijus es incapaz de valorar la intensidad del ser humano, sus inquietudes, sus ideas, y sus motivaciones? ¿Acaso en su paupérrima teoría de la acción humana no hay espacio para un fin distinto que la remuneración monetaria?

Acto seguido, Pijus continúa con su sempiterno desconocimiento de la teoría institucional y del orden espontáneo: Por otra parte es el individualismo el que rompe los lazos familiares y sociales, al contribuir en la atomización de la sociedad. Debemos recordar que nunca los lazos familiares y sociales estuvieron más unidos que antes de la implantación del mercado de mano de obra, que convirtió a las personas en mercancías.

¿Es necesario volver a repetir que el liberalismo no se sustenta sobre ningún tipo de individualismo sino sobre la cooperación social voluntaria? ¿Acaso la división del trabajo y las instituciones del derecho, del lenguaje o del dinero transmiten alguna suerte de individualismo cerrado al entorno? Quien rompe los lazos sociales es quien pretende construirlos e imponerlos, no quien permite que éstos surjan y se refuercen. La sociedad no se atomiza, precisamente porque la sociedad no existe sin individuos libres que decidan participar en ella.

Lo gracioso es la afirmación de que los lazos familiares y sociales se resquebrajaron con el mercado de la mano de obra. Vamos a ver, ¿de dónde viene la palabra proletario? ¿De prole? Ah vaya, ¿y qué tendrá que ver la prole, los hijos, con la familia? Imagino que nada, sobre todo para quien pretende nacionalizar a los púberes. Las instituciones, los únicos instrumentos que permiten la cooperación social y los lazos humanos, surgen porque hay libertad, no porque nadie las construye. Pijus, ¿quién creó el lenguaje? ¿quién creó el derecho? ¿Acaso el lenguaje y el derecho no son instrumentos esenciales para la multiplicación de los lazos sociales (mejor no hablemos de la Ley de Metcalfe)?

La brillante argumentación de Pijus está casi llegando a su fin, pero todavía es capaz de ofrecernos algunas perlas interesantes: Lo más gracioso del artículo de Rallo es cuando dice lo siguiente: “la educación debe ser elegida libremente por los padres, sin leyes que la coarten o restrinjan. La familia tiene derecho a educar a sus hijos.” O bien en este momento Rallo olvida que la familia tiene un poder condicionante del pensamiento mucho más amplio que la educación pública o bien Rallo intenta armonizar sus ideas con el dogmatismo católico para el que escribe.

Pijus debe haber olvidado dónde nace el individuo o acaso estará sugiriendo que la familia debe tener prohibido educar a sus hijos. En todo caso, resulta ridículo pretender que todas las personas se conviertan en ganado del Estado; la familia no coacciona porque permite su derecho de separación. El niño sigue teniendo derecho a no someterse a los dictados de sus padres, a interrumpir la educación cuando lo desee o a acudir a otros centros donde el programa educativo no se acople al de su familia. Todo ello, claro está, asumiendo las pertinentes consecuencias. ¿Qué secesión permite el Estado? ¿Qué cambio de centro, de visión, de programa, de valores tolera el Estado? ¿Cómo un conjunto de petulantes sujetos se erigen en capitostes de todos los restantes individuos? ¿De dónde obtienen el apoyo y la legitimación?

La libertad no consiste, repito una vez más, en tener la capacidad de elegir con independencia de las influencias vividas. Pijus sigue siendo libre, aun cuando se haya convertido en un siervo del Estado. La coacción es anterior; pasa por obligar al niño a asistir a unas aulas uniformemente regladas y financiadas con el sudor de la frente ajena. Los borregos siguen vistiendo al emperador.

Comentarios

 
La contumacia de esta gente es pasmosa.

Los últimos datos en la universidad no pueden ser más demoledores. Todas las carreras excepto las ingenierías están quedando como quedó en su día Clásicas, pierden matriculación por centenares, queda un alumnado residual.

Después de esto aparece un estudio (no lo tengo localizado, lo leí en un diario) donde se nos informa de que en España ya NO es una ventaja tener titulación universitaria para encontrar trabajo. Este dato explica el anterior.

Veamos: el socialismo nos da una universidad pública con el argumento de que si no hay intervención del estado, por la falta de rentabilidad de ciertas carreras, estas se perderían. Pasados los años, todas las carreras están en esa posición, con lo que ¡tenían razón! o se mete el estado con dineros a raudales o nos quedamos sin universitarios.

Al socialismo lo llamo yo a veces, la ideología del trinquete: tienen razón pase lo que pase.

Naturalmente, dado que hay carreras muy evidentemente útiles que han sido desprestigiadas hasta la inutilidad, la conclusión es la contraria, que muy probablemente, carreras como Clásicas que no son aparentemente útiles, simplemente las estropeo la universidad pública antes que a las otras. Pero esta conclusión es imposible para un ungido, de eso no hay duda.

En cuanto al detalle del desastre perpetrado por los socialistas en la universidad española, me parece sencillo: está bajando el nivel en consonancia con el alumnado que les llega de bachillerato. Ya ha llegado a un límite por debajo del cual ya no sirve como ventaja laboral. Luego, como, a pesar de que la matrícula está pagada con fondos del estado, es carísimo cursar una carrera, sólo prosiguen los estudios universitarios los que tiene un componente vocacional muy importante en su decisión sobre sus estudios.

¡Han expulsado el mercado! No me digas que no es un éxito.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 21:54 (1)
El Estado permite la secesión. Ahora bien, tienes que devolver loq eu tomaste:), los derechos que adquiriste en el orden jurídico y la educación qeu recibiste. En principio, el suicidio está permitido:P. Y no, el niño no tiene posibilidad de largarse. No la tiene. S alguien lo encuentra lo adoptará, porque de hecho, en los órdenes jurídicos sin Estado, normalmente, los niños no tienden a ser considerados como capacitados para obrar jurídicamente...
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:06 (2)
No, el ladrón no puede exigir nada de lo que ha tomado, porque no era suyo. De todas formas, insisto, esa defensa tiene un problema fundamental: los ricos pueden marcharse del Estado sin prácticamente devolver nada o, al menos, mucho menos de lo que les fue tomado. Serían los pobres los que deberían seguir trabajando durante años para el Estado.

Y sí, los niños pueden largarse cuando se emancipan. No antes, porque entonces tampoco cabe afirmar propiamente que quieran hacerlo. Hace falta algún tipo de materialización.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:10 (3)
Por eso, yo creo qeu o establecemos una economía autarquica o creamos un Estado de tamaño mundial.

Algún tipo de materialización como cuál? Empezar a ganarse las lentejas o simplemente la declaración de voluntad unilateral? Hará también falta qeu los otros lo reconozcan como un sujeto de derecho, o sino, como va a contratar y ejercer su autonomía?
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:36 (4)
Por cierto, en cuanto a sistemas educativos nacionales bien montados, o invito a echar un vistazo al francés. Os ibais a quedar acojonados.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:38 (5)
Ni una cosa ni la otra, establecemos órganos de jurisdicción de carácter individual con capacidad para ejercer su poder sobre los recursos apropiados. Esto no tiene nada de autarquía, sino de sociedad.

Pues por ejemplo irse de casa; ya te he dicho que la persuasión coactiva no es legítima. ¿Te leíste mi artículo del hijo pródigo? :)
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:39 (6)
Así, por ejemplo, tenemos la famosa historia del Ministro francés de Educación que después de mirar su reloj y al momento el rostro de su visitante, exclama: "En este momento, en 5431 escuelas públicas de educación elemental, están escribiendo un ensayo acerca de las maravillas del invierno."

http://www.liberalismo.org/bitacoras/1/2591/
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:41 (7)
o creamos un Estado de tamaño mundial

Citoyen dixit.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 22:57 (8)
Es absolutamente coherente, bastiat. De hecho ciertos liberales han caído en la trampa de creer que las fronteras se eliminan expandiendo el ámbito de decisión del Estado. El problema es que ello sólo elimina las vías de escape del individuo y la competencia entre ordenamientos. La cuestión no es ampliar el ámbito de discrecionalidad, sino devolverlo a los auténticos responsables de la acción.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 23:00 (9)
Bueno, la tasa de productividad francesa, según creo aunque sé que empiezo una guerra que no puedo ganar, es la tercera o la cuarta del mundo. Cierto es que tienen un paro del copón pero bueno...Tampoco sé si es debido al sistema educativo.

Lo que quería expresar es que sistema educativo público no es sinonimo de mediocre. Lo que ocurre es que en francia ponen a competir a los niños desde que empiezan el bachiller, para entrar en las escuelas superiores necesitas pasar una oposición.

Por otra parte, que el hecho de que la persuasión coactiva no es legítima, debe ser algo que te pueda parecer bien a tí. Ahora bien, no hay un sólo sistema jurídico en el mundo en el que no se reconozca el derecho de los padres a traer de la oreja a sus hijos a casa. De hecho, tampoco creo qeu haya ninguna persona que siendo adulta no agradezca que lo trajeran de la oreja... Yo por ejemplo. Osea hablamos de una quimera de ilegetimidad...
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 23:09 (10)
Buf, productividad, palabra mágica: http://www.libertaddigital.com:83/php3/opi_desa.ph...

Aparte, me gustaría saber cómo establecer la casualidad. Quizá sean más productivos por tener a Chirac como presidente, por los tropecientos tipos de queso, o por la influencia de la catedral de Notre Damm.

Sistema educativo es sinónimo de adoctrinador, si encima quieres dotarle de un enfoque pro-mercado (enfoque discutible, ¿qué pasa si los padres son socialistas?) es incapaz de asignar adecuadamente los recursos productivos y aprovechar las oportunidades de ganancia: precisamente porque no es su misión buscarlas (se asienta en el robo, no en el intercambio).

Insisto, si te quedaste en casa es por que hubieras vuelto, el tirón de orejas es mucho menos necesario de lo que parece, en todo caso para recortar tiempo.
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 23:23 (11)
Enviado por el día 22 de Febrero de 2006 a las 23:47 (12)
Y yo con un post de retraso. Si hubiese leído este ni me hubiera molestado en responderle a pijus. Dos respuestas punto por punto es demasiado honor.
Enviado por el día 23 de Febrero de 2006 a las 00:50 (13)
Este artículo es digno de ser enmarcado.
Enviado por el día 24 de Febrero de 2006 a las 22:41 (14)

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