21 de Junio de 2005

Hay que reconocer que las peticiones de determinadas minorías son de lo mar de divertidas y en algún caso, rozan el esperpento. Tal es la petición, desde mi punto de vista de la Asociación de Naturistas Vascos cuya demanda es la de poder ejercer la desnudez con toda libertad y eso, por arte de birlibirloque, se convierte en poder ir en pelotas por el centro de Pamplona si él o la interesada se atreven.

Dicha petición fue llevada ante el honorable Parlamento de Navarra, a la sazón dominado por el UPN, ejerciendo como defensor el grupo parlamentario de IU que a través de su portavoz, Ana Figueras, intentó convencer a sus señorías de que ejercer el naturismo supone que "todos los ciudadanos tienen los mismos derechos y libertades, y cada persona puede ejercerlos, sin imponerlos, siempre que estén dentro de la ley". Arriesgada reflexión la de la señorita o señora Figueras que desconozco si en sus momentos de ocio ejerce tan sana como barata afición. Parece ser que la España de ZP y la Navarra de UPN no está preparada para la situación ya que ninguno de los grupos parlamentarios, UPN, PSN y CDN votaron a favor del destape, calificando en algún caso la moción de disparatada. El PSN por eso de no llamar la atención demasiado decidió abstenerse.

Algo de razón si tiene Carlos Pérez-Nievas (CDN), la moción es disparatada porque no creo que esta sea una cuestión para que termine en el Parlamento de Navarra, supongo que el dinero de los contribuyentes tiene otros destinos mucho más prácticos que discutir la oportunidad de que un porcentaje ínfimo de la población navarra o española tenga la posibilidad de enseñar las vergüenzas por el centro de la ciudad. Los ciudadanos que así lo quieran tienen acotados unas zonas en piscinas, en Madrid hay zonas en algunas públicas, en playas y calas e incluso en pueblos abandonados que los colectivos de naturistas y nudistas han acondicionado y preparado para que se pueda practicar el despelote conviertiéndolo en un lucrativo y quizá hasta recomendable negocio.

Además, siempre he encontrado a este colectivo un poco hipocritilla, todo hay que decirlo. Si se es nudista, se es nudista con todas las consecuencias. Poco dice de la valentía del que lo ejerce si decide no practicarlo en pleno febrero o si para no dañarse los pies, se llevan zapatos o chanclas. Eso no es nudismo, eso es ganas de llamar la atención. Dicen los nudistas que ir desnudo es natural pero nada más alejado de la realidad. Lo natural es ir vestido y esto es porque hace decenas de miles de años, el ser humano empezó a cubrirse con ropas lo que le condujo a la pérdida del pelo que nos protegía del frío o a que los pies no desarrollaran, como ocurre en la mayoría de los animales unos cascos o durezas o almohadillas que impiden que los extremidades se dañen.

Además, personalmente a mí no me va alterar el cruzarme con una persona desnuda, me podrá llamar la atención por lo poco habitual que es pero no todas las personas piensan lo mismo, hay muchos que se pueden sentir heridos y moralmente escandalizados y entonces entramos en una espiral absurda de derechos y deberes que no hará otra cosa que calentar al personal, en el buen sentido. Un amigo mío dice que todo el mundo pierde cuando se desnuda y salvo algunos cuerpazos que con el tiempo dejarán de serlo, creo que tiene toda la razón del mundo. Navarra puede que no esté preparada para el nudismo urbano pero es que también son ganas de crear polémica.